Inicio  








  Que no te cojan de...
Bookmark & Share

20 de mayo de 2009

Procurador General de Texas

Los usuarios de telefonía celular deben tener cuidado de una nueva amenaza de alta tecnología conocida como "smishing". Los estafadores han empezado a enviar mensajes de texto fraudulentos a teléfonos celulares para engañar a las personas y lograr que revelen información personal, números de cuentas financieras y contraseñas.

Como muchos usuarios de computadoras ya saben, los correos electrónicos basura conocidos como "phishing" llegan frecuentemente a sus correos electrónicos. Muchos usuarios de computadoras han aprendido a identificar y borrar estos correos basura que parecen provenir de bancos, empresas de tarjetas de crédito y agencias gubernamentales legítimas. Los proveedores de servicio de Internet y los filtros de spam a menudo bloquean estos mensajes así que nunca llegan a su objetivo.

Aún no se han desarrollado filtros eficaces para los mensajes de texto basura que se envían a los teléfonos celulares y muy pocos de ellos son bloqueados por los filtros o los proveedores de telefonía celular. Mientras que los mensajes de correo electrónico con errores de ortografía y enlaces que no sirven hacen más fácil reconocer un correo electrónico basura, puede ser difícil determinar si un mensaje de texto es legítimo. No hay imágenes, solo texto, y el mensaje usualmente es corto.

Por ejemplo, los mensajes de smishing quizás amenacen a la persona que los recibe con un cobro inminente que se puede cancelar solo si el usuario visita una página Internet falsa que aparece en el mensaje. Otra estafa común indica a la persona que llame a un número telefónico gratuito para completar o cancelar una transacción. La "operadora" que contesta el número muy amablemente toma el número de la tarjeta de crédito o de débito de la persona y usa esa información para estafarla.

Las personas no deben contestar los mensajes de texto basura que reciben. De hecho, no deben llamar a ningún número telefónico que aparezca en el mensaje de texto, ni hacer clic en enlaces a páginas Internet. Activar enlaces que aparecen en mensajes de texto inesperados puede enviar a los usuarios a páginas Internet o permitir a los ladrones de identidad que capturen la información personal sensible de los usuarios. Las instituciones financieras legítimas no llaman ni envían correos electrónicos solicitando esta información. Los clientes a quienes les preocupa un supuesto cargo pendiente deben comunicarse directamente con el proveedor de servicios o con el banco y preguntar al respecto.

Las personas responsables de enviar estos mensajes de texto, llamadas y correos electrónicos fraudulentos están tratando de obtener la información personal de identificación de los clientes. Los texanos deben borrar los mensajes de texto o correos electrónicos inesperados que reciban y colgar la línea.