1 de agosto de 2006

Sepa cómo presentar la imagen que la empresa busca para contratarla

Claudia Carbonell
Especial para Vida y Estilo

1 de agosto de 2006

Hay dos factores principales que debe tener en cuenta al ir a una entrevista de trabajo: proyecte que tiene la habilidad suficiente para ocupar el puesto y presente la imagen que la empresa busca para contratarla.

Su imagen

Estudie la empresa o el lugar donde usted quiere solicitar el puesto. Cada compañía tiene una imagen propia y usted debe procurar proyectarla. Haga una investigación en la internet para descubrir cuál es la misión de la empresa y también su código de ética. Esto le dará ideas de cómo presentarse en la entrevista.

Generalmente, las empresas que hacen mucho hincapié en servicio al cliente y calidad requieren un personal que presente una imagen profesional y discreta. Por lo tanto, opte por lo clásico, como las prendas de dos piezas.

Si en cambio la compañía es de índole artístico, usted tendrá más versatilidad en la elección de su guardarropa. Invierta en algunas prendas de corte clásico de telas que no reflejen la temporada. Las telas adecuadas son por ejemplo, gabardinas, textiles con fibras mezcladas en lycra y algodón, y algunas mezclas de poliéster. Elija colores neutrales y líneas sencillas. Evite lo llamativo como cuellos, mangas y botones voluminosos.

Dos o tres conjuntos en tonos sólidos como blanco, negro y azul oscuro son inversiones sabias. Igual que las chaquetas que tengan cuello solapa no muy ancho, bolsillos tipo ojal (este estilo disimula mucho las caderas anchas) con dos o tres botones, un pantalón de corte derecho y asegúrese que le quede holgado.

De muy mal gusto es vestir con prendas que queden ajustadas al cuerpo, especialmente para el trabajo. Adquiera un par de blusas en seda o algodón de cuello con abotonadura adelante de manga larga o a mitad de brazo. El color blanco sería ideal, igual que otro tono neutro.

Adquiera dos pares de zapatos de buena calidad blancos o beige, y un par de bolsos del mismo tono. Los accesorios no deben ser llamativos. Los collares imitación perlas y las cadenas en oro o plata combinan bien con todo y la hacen lucir elegante.

Vaya maquillada profesionalmente. Absténgase de usar delineador de labios café o negro y evite la línea gruesa de los ojos.

Demuestre sus habilidades

¡Prepárese! El motivo fundamental del porqué muchos tienen malas experiencias en las entrevistas de trabajo es la falta de preparación. Esto también causa inseguridad, ya que ésta es reflejo de no confiar en las habilidades propias.

Es indispensable que investigue la compañía en la internet con su agenda de apuntes a mano para que anote toda la información importante de la empresa. Datos como la misión de la compañía, los servicios o productos que ofrece al cliente, las ventajas o garantías que tienen establecidas en el mercado. Cuántos años llevan en operación, cuántas sedes tienen, cuál es su tipo de clientela y qué planes tiene la empresa para el futuro.

Ahora haga una lista de todas sus habilidades procurando aparear las necesidades y metas de la compañía con sus capacidades, cualidades y experiencia. Continúe haciendo una lista de todas sus cualidades de tipo de personalidad: es usted puntual, responsable, colaboradora, exigente consigo misma, meticulosa, trabajadora, etc.

Asimismo, haga una lista de sus cualidades internas, sus virtudes, creencias, ideales. ¿Es usted honrada, cordial con los demás? ¿Cree en dar lo mejor de sí misma, se esfuerza por hacer un trabajo excelente? ¿Le gusta crecer, mejorar? Todo esto le ayuda para promoverse eficazmente.

Anticipe preguntas clave, como por ejemplo: "¿Por qué quiere usted trabajar en esta empresa?". A través de su investigación podrá contestar esta pregunta con exactitud.

Otras que debe esperar son: "¿Por qué se siente capacitada para desempeñar este empleo?"; "¿cuáles son sus metas para el futuro?".

Tenga en cuenta que para contestar estas preguntas usted debe asociar los objetivos de la empresa con los suyos. Nunca mencione nada que pueda ser conflictivo para la compañía.

Otra posible pregunta clave es: "Hábleme un poco de usted". No sea tímida ni menosprecie todo lo lindo que usted encierra. Hable de usted como si fuera la persona más importante del mundo exponiendo una combinación de cualidades de tipo moral y ético como también profesional. Esté preparada para responder a cualquier pregunta que haga dudar del cumplimiento con su obligación.

Si tiene hijos, algunas serían: "Mientras trabaja, ¿quién cuida de su hijo?" "¿Tiene usted medio de transporte?". "¿Tiene usted algún impedimento físico que le dificulte cumplir con su trabajo?". "¿Tiene hijos en otro país?".

Responda a estas preguntas por escrito dando respuestas inteligentes. No olvide que el entrevistador también quiere saber qué tan optimista es usted.

Ensaye delante del espejo las respuestas a estas preguntas y si se siente insegura o necesita más investigación, hágalo y prepárese más. Pida a un familiar o amiga que le haga una entrevista simulada con las anteriores preguntas.

En la entrevista

Desde que usted abre la puerta del lugar donde le harán la entrevista de trabajo estará bajo meticulosa inspección. Esencialmente, su entrevistador querrá asegurarse que usted tenga la habilidad, conocimientos y experiencia necesarios para ejecutar la labor que se le asignará. Si una secretaria o asistente no le abre la puerta donde será efectuada la entrevista, toque a la puerta antes de entrar. Es descortés abrir la puerta sin antes anunciarse. Podría ser que su entrevistador tuviera una cita en el momento en que usted entra.

Haga una entrada triunfal. Entre sonriente, camine firme con los pies derechos (caminando en línea recta) y echando los hombros hacia atrás. Salude mirando a la persona a los ojos y estréchele la mano con firmeza, ya que esto refleja seguridad. Espere que él le dé permiso de tomar asiento antes de sentarse. Si cruza la pierna, coloque las dos piernas hacia el lado, si no, sólo cruce sus pies de lado.

Manténgase siempre en control y no juegue con sus dedos, el pelo ni con la ropa. Conteste todas las preguntas mirando al entrevistador a los ojos y con una sonrisa. Recuerde que no tiene nada que temer ya que usted con anticipación se ha preparado para esta ocasión. ¡Buena suerte!