12 de septiembre de 2006
SEATTLE, Washington, EE.UU - La población hispana es una víctima potencialmente propicia a estafas con préstamos usureros debido a su tamaño y tasa de crecimiento, indicó una investigación de la Comisión Federal de Comercio al descubrir que los consumidores latinos son más del doble blanco probable a fraude que el resto de los estadounidenses.El estudio del 2004 de la comisión mostró que los latinos pueden ser especialmente vulnerables, en parte por las barreras del lenguaje y las diferencias culturales. Los hispanos, que constituyen casi el 9% de la población del estado de Washington, son el grupo racial más numeroso y de más rápido crecimiento en esa región."Conforme crece esa comunidad, tiene una participación mayor en nuestros mercados", dijo Scott Kinney, director de comunicaciones del Departamento de Instituciones Financieras de Washington. Los hispanos suelen no manejar sus fondos mediante bancos y por tanto no son alcanzados por los anuncios de servicios financieros, indicó.Teresa Belmont, madre soltera de cuatro hijos que vive en Puyallup, adquirió una furgoneta a crédito con una tasa de interés de 15% mientras el rédito regular era de apenas un 4%. El vendedor le dijo que esa tasa era la mejor que recibiría por su condición de inmigrante mexicana. Una semana más tarde, Belmont fue prácticamente obligada a firmar otros documentos que casi le duplicaron la tasa de interés a 29%, pero lo supo un año después cuando en un programa de radio se enteró de la Unión de Crédito White River de Enumclaw, que dirige Linda Kleppe-Olson.Kleppe-Olson revisó el préstamo y al comunicarse con la agencia automotriz que le vendió la furgoneta a Belmont descubrió que el precio original de 9.000 dólares crecería a 16.000 dólares durante la vida del préstamo. Entonces ayudó a Belmont a lograr la anulación del contrato del préstamo y la entrega de uno nuevo con una tasa de un 8,2%. Ahora, el vehículo está casi pago."Muchos de nosotros no tenemos idea de la cantidad que pagamos en intereses", dijo Belmont. "Algunas veces saben que no hablamos bien inglés y se aprovechan", señaló.Ante esa situación, la oficina del procurador general en el estado de Washington ha convocado a reuniones entre empresarios, organizaciones comunitarias y agencias gubernamentales para ayudar a los latinos a protegerse en las operaciones comerciales. Los encuentros están previstos para el mes próximo.