22 de marzo de 2007
Por: El Nuevo Dia
El comisionado de la Federal Home Administration (FHA) y subsecretario de la Vivienda, Brian D. Montgomery, se mostró confiado en que el Congreso de los Estados Unidos aprobará este año una reforma a ese programa federal, la cual permitirá que más familias puedan adquirir un hogar propio al tiempo que se detienen las prácticas de abuso al consumidor.
Montgomery señaló que la reforma al programa FHA implicaría un paso de avance para todas las familias, en especial aquellas pertenecientes a grupos minoritarios, en la medida en que más personas con ingresos bajos podrán acceder a productos de financiamiento para adquirir una vivienda.
Según Montgomery, los cambios propuestos para FHA no implican que se vayan a flexibilizar los criterios para solicitar préstamos, sino una modificación de las primas a fin de que más personas pueden beneficiarse de dicho programa.
La FHA es la entidad federal que garantiza préstamos hipotecarios a personas que adquieren un hogar. En caso de que un ciudadano incumpla en el pago de su préstamo, la aseguradora responde por dicho incumplimiento al tiempo que cuenta con un programa para evitar que la institución bancaria ejecute la propiedad.
“Nuestra responsabilidad es proveer un producto de financiamiento seguro a precios razonables”, indicó Montgomery al reconocer la importancia de la educación al momento de financiar una propiedad.
Según el ejecutivo federal, quien hizo sus expresiones durante un foro de la Asociación de Banqueros Hipotecarios, además del cambio a la prima, la reforma implicará un aumento al tope prestatario. Al presente, en Puerto Rico pueden otorgarse préstamos FHA de hasta $247,000.
Montgomery reconoció que el hecho de que la FHA no se haya modernizado lo suficiente provocó que miles de familias en los Estados Unidos e incluso Puerto Rico tuvieran que optar por préstamos más caros o para personas con crédito riesgoso, también conocidos como subprime loans.
Así las cosas, miles de familias, adquirieron sus hogares a través de préstamos hipotecarios que no necesariamente se ajustaban a la realidad financiera del consumidor, por lo que miles de estos pudieron ser víctimas de entidades prestatarias inescrupulosas.