18 de octubre de 2007

Por: La Opinion

El repunte del precio futuro del barril de gasolina por encima de los 88 dólares suscitó ayer reacciones en distintas esferas, desde llamados a regular el mercado hasta renovados reclamos para aprobar nuevos estándares de eficiencia ante el temor de que la gasolina suba de precio.

La Administración de Información de Energía (EIA) explicó ayer que el alza más reciente en el precio del petróleo "fue la culminación de nueve meses de tendencias alcistas en las que el precio futuro del WTI, el parámetro estadounidense del petróleo crudo, se incrementó en 35.68 dólares por barril desde el 18 de enero, cuando se encontraba a 50.48 dólares".

Particularmente en el caso del petróleo, las alzas afectan directamente los precios del día.

Ayer en California el precio promedio de la gasolina regular, según la Asociación Americana de Automovilistas (AAA) de California, fue de 3.096 dólares, comparado con 3.069 dólares el martes. El mes anterior el precio alcanzó 2.933 dólares.

El precio más alto alcanzado por un galón de gasolina regular sin plomo en el área urbana de Los Ángeles fue de 3.487 dólares el 9 de mayo pasado. En cuanto al diésel, éste fue de 3.461 dólares el 6 de mayo.

Los precios de la gasolina se han triplicado en los últimos cinco años, y al mismo tiempo, según cifras de la organización no lucrativa Public Citizen elaboradas a partir de registros oficiales, las seis compañías petroleras más grandes del mundo ?Exxon Mobile, Chevron, Connoco Philips, BP, Shell y Valero? han obtenido en conjunto casi 500,000 millones en ganancias desde 2001.

De acuerdo con el índice NYMEX, el precio de entrega arreglado para noviembre se fijo ayer en los 88.61 dólares, una subida atribuida a las advertencias de Turquía en el sentido de que se prepara a atacar las bases de los separatistas curdos en el norte de Irak.

Sin embargo, la EIA, que es la dependencia oficial del gobierno federal en materia de información energética, hizo ver el martes que los precios del crudo descienden a menudo una vez terminada la época vacacional veraniega, y se pregunta hasta qué grado la especulación financiera tendrá que ver con el repunte registrado ese día.

Tyson Slocum, director del programa de energía de Public Citizen, no se anduvo por las ramas en una conversación telefónica sostenida con él. Según el analista, que recientemente compareció ante el Comité de Energía del Congreso, el salto que pegó el precio del crudo es obra de especuladores interesados en lucrar a partir de temores y amenazas inexistentes o irreales.

"La posibilidad por ejemplo de que Turquía ataque el norte de Irak no tendría que perturbar los mercados petroleros, pues como se sabe, la capacidad petrolera iraquí ya se encuentra severamente dañada, ya hay una guerra ahí, y aun cuando se abriera un nuevo frente, eso no cambiaría mucho las cosas."

Quienes capitalizan estos rumores, dijo, son las compañías petroleras, los hedge-funds y algunos inversionistas, gracias a la desregulación del sector petrolero en 2000 que les dejó las manos sueltas.

Los precios a futuro, como lo indica la expresión, son operaciones de compra y venta de bienes o capital (en este caso de petróleo), que funcionan fijando previamente una fecha final de transacción o de entrega, y una suma o cotización llamada "precio a futuro".

Los precios del petróleo se fijan en el NYMEX ?que es el mayor mercado de futuros? para el crudo ligero WT (Western Texas). El barril de Brent se maneja en el Intercontinental Exchange (ICE).

Ayer la organización Alianza para el Ahorro de Energía aprovechó la subida del combustible para hacer un llamado al Congreso a que apruebe estándares superiores de eficiencia para los vehículos automotores.

"El logro de la eficiencia energética en el sector transporte es un elemento clave en ayudar a reducir emisiones contaminantes y a reducir nuestra dependencia de petróleo importado", dijo Kateri Callahan, presidenta de la Alianza.

La organización recomienda a los conductores que opten en lo posible por vehículos híbridos o de bajo consumo de combustible o, si no tienen esa opción, que mantengan sus autos en buen estado de funcionamiento y con las llantas correctamente infladas.