17 de octubre de 2008
Por: El Nuevo DiaUna máquina de tamaño bien pequeño es una de las últimas armas de los delincuentes para hurtar la información grabada en la franja magnética de una tarjeta de crédito o débito, para así robar su identidad y cometer fraudes a nombre suyo, informó la Policía.La División de Robo y Fraudes contra instituciones Bancarias y Financieras en la Policía está tras la pista de varias organizaciones criminales que usan este esquema, dijo el teniente Joseph Molina, director de la división.Una persona que llamó hoy a
El Nuevo Día denunció que ayer, al abrir el sobre que contenía el estado de cuenta de su tarjeta de crédito, encontró tres cargos de compras hechas en su nombre que sumaban casi $700, aunque nunca las hizo.La persona, que pidió que no se revelara su identidad y ciertos detalles de lo que le ocurrió explicó que las compras fueron realizadas el mismo día en un mismo comercio.
Aunque esta persona logró que la compañía con la que tiene su tarjeta de crédito eliminara de su cuenta las compras hechas a su nombre, comoquiera manifestó sorpresa en la manera en que los delicuentes roban la identidad de otras personas. Este esquema de copiar la información de las tarjetas de crédito y débito es conocido como 'squiming', según el sargento Marcos Ramos Picart, supervisor de la sección de Fraude en la Policía.Como parte de este esquema los delincuentes hacen nuevas tarjetas de crédito o débito, proceso que se conoce también como clonear, dijo Ramos Picart.Las personas que cometen este fraude usan licencias de conducir falsificadas, que tienen el mismo nombre que aparece en la tarjeta de crédito.De esa manera roban la identidad de una persona y usan su línea de crédito, que puede ascender a miles de dólares."En menos de ocho horas le pueden robar miles de dólares a la persona, dependiendo de la línea de crédito disponible" que tenga, explicó el sargento. En el caso de las tarjetas de débito, Ramos Picart explicó que hay que evitar que alguna persona vea cuando se escribe el número secreto, porque de esa manera es que pueden usar luego la tarjeta para retirar dinero o comprar artículos.El martes la Policía detuvo a una persona que compró enseres y retiró dinero por un valor de $150,000, en sólo tres meses, usando tarjetas falsificadas de crédito y débito.