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La gran epoca.com

WASHINGTON — La perspectiva de que la economía americana crecerá y elevará a millones de personas pobres a la clase media, se ve muy débil, según el análisis de datos salariales desde 1979.

Los salarios han aumentado en un promedio del cinco por ciento, mientras que la productividad aumentó el 74,5 por ciento durante 1979 a 2012, de acuerdo con un documento informativo publicado en agosto por el Instituto de Política Económica (EPI).

Los frutos del trabajo no han sido transferidos en forma de salarios más altos.

La noticia es peor para la gran mayoría de asalariados durante la reciente década, 2002-2012: Los salarios se han congelado, o han bajado.

Los autores Lawrence Mischel y Heidi Shierholz, llevaron a cabo un análisis exhaustivo de las tendencias salariales al analizar diversos datos registrados en la Oficina de Estadísticas Laborales y de Encuesta de Población Actual. El Dr. Mishel es economista y presidente de EPI, y el Dr. Shierholz es economista del Instituto.

Mishel y Shierholz concluyeron que no importa si el trabajador es de cuello blanco o azul, con o sin título universitario, la última década fue testigo del estancamiento de salarios. Independientemente de los salarios, del nivel de ocupación, género, raza / origen étnico, o de educación, en todo caso, han crecido anémicamente; la productividad creció cerca del 25 por ciento del 2000 al 2012, de acuerdo con sus artículos “Una década de salarios plenos”.

El panorama económico fue desolador este año, de acuerdo con Robert Reich, ex Secretario de Trabajo en la administración Clinton, en su blog del 25 de agosto:

“El porcentaje de estadounidenses que viven por debajo del umbral de pobreza ha ido en aumento aun cuando la economía ha comenzado a recuperarse, desde el 12,3 por ciento en 2006 a cerca del 14 por ciento este año. Más de 35 millones de estadounidenses viven por debajo del umbral de pobreza. Muchos de ellos tienen puestos de trabajo. El problema es que estos puestos de trabajo simplemente no pagan lo suficiente para sacar a sus familias de la pobreza”.

En su discurso de conmemoración por el 50 aniversario de la Marcha en Washington, el 28 de agosto en el Lincoln Memorial el Presidente Barack Obama dijo:

“Durante más de una década, los trabajadores estadounidenses de todas las razas han visto estancados sus salarios e ingresos. A pesar de que los beneficios empresariales se elevan, así como el pago de unos pocos afortunados, la desigualdad ha aumentado de manera constante durante décadas. La movilidad ascendente se ha vuelto más difícil. En muchas comunidades de todo el país, en ciudades, suburbios, y aldeas rurales, la sombra de la pobreza afecta también a nuestra juventud...”.

Antes de la gran recesión 

El informe analizó los salarios durante el período que comienza con la Gran Recesión (2007-2009) y que terminó en 2012. Los salarios totales cayeron el 70 por ciento al fondo de distribución salarial.

Sin embargo, la causa no puede atribuirse totalmente a la caída de la economía y a la pérdida de puestos de trabajo durante la Gran Recesión, que se produjo oficialmente de diciembre de 2007 a junio de 2009. Las debilidades en la economía fueron evidentes en su período anterior.

Los autores analizaron salarios medios por hora ajustados a la inflación (los salarios “reales”) de la Encuesta de Población Actual. Usaron el cambio de salario promedio durante 2000 y 2007. El salario promedio es del 50 por ciento o el salario medio es menor al que gana la población de trabajadores, y la mitad de la población de trabajadores gana más.

“Entre 2000 y 2007, el trabajador medio ha experimentado un crecimiento salarial del 2,6 por ciento, a pesar del crecimiento de productividad del 16 por ciento”, dice el informe.

Por desgracia, el aumento del 2,6 por ciento ínfimo para el 50 por ciento durante este período no fue consistente para los trabajadores con salarios más bajos. Por ejemplo, el 20 por ciento de los trabajadores, vio un crecimiento salarial de sólo el uno por ciento. El 80 por ciento vio un aumento mayor que la mediana del 4,6 por ciento. Este último es todavía mucho menor que el 16 por ciento del crecimiento de la productividad del país.

Los autores encontraron que a principios del siglo, entre 2000 y 2002, el crecimiento de salarios siguió al impulso del breve crecimiento de salarios a finales de 1990, pero fracasó. Entre 2002 y 2012, “la gran mayoría de los asalariados ya habían experimentado una década de pérdida, una en la que los salarios reales o fueron estables o decrecieron”.

Reich pidió un aumento del salario mínimo del actual de 7,25 dólares por hora, a 10,50, y 15 dólares en las zonas del país donde el costo de vida es más alto. “El mínimo federal simplemente se mantuvo al día con la inflación en la década de 1960, ya que hoy sería más de 10 dólares”, escribe.

En su discurso del 24 de julio en la Universidad Knox en Galesburg, Illinois, el Presidente Obama hizo hincapié en la ruptura del modelo americano de una clase media en expansión para traer prosperidad compartida.

“En el período después de la Segunda Guerra Mundial, una creciente clase media fue el motor de nuestra prosperidad... Pero con el tiempo, el motor empezó a estancarse. Esa negociación comenzó a deshilacharse. La tecnología hizo algunos trabajos obsoletos. La competencia global envió a otros al extranjero. Se hizo más difícil para los sindicatos luchar por la clase media. Washington repartió grandes recortes de impuestos a los ricos, y más pequeños aumentos del salario mínimo para los trabajadores pobres. El vínculo entre productividad y aumento de los salarios para las personas se deshizo. Los ingresos de más del uno por ciento casi se cuadruplicó desde 1979 hasta 2007, mientras que la familia típica apenas pudo moverse”.