7 de marzo de 2012
Infobae.com
Un jurado compuesto por ocho hombres y cuatro mujeres declaró a Stanford, que fue considerado uno de los hombres más ricos de los EEUU, culpable de 13 de los 14 delitos de los que se lo acusaba, tras cinco semanas de juicio.
Según el fallo, el ex financista es culpable de fraude, conspiración, lavado de dinero y obstrucción a la justicia.
Tras la decisión del jurado, Stanford, que cumplirá 62 años en unos días, se enfrenta a un condena de hasta 20 años de prisión por los cargos más graves.
El acusado se declaró inocente de haber estafado a casi 30 mil inversionistas de más de 100 países mediante inversiones falsas realizadas por el Stanford International Bank, con sede en Antigua.
Durante el juicio, los fiscales explicaron cómo Stanford reiteradamente vaciaba el banco que poseía usándolo como su "cajero automático personal".
El ex financista compró un castillo en Florida para una de sus novias, tenía un yate en el Caribe y financió un premio de 20 millones de dólares para un torneo internacional de cricket.
Antes de que la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC) presentara cargos en su contra, su fortuna personal había sido estimada en cerca de US$ 2.200 millones por la revista Forbes.