28 de enero de 2020
El Vocero
El presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD), Jorge Argüelles, denuncia que —aun con la nueva ley— la situación de los permisos sigue siendo una odisea para los comerciantes.
La Ley de Permisos aprobada por la actual administración en 2017 está lejos de convertirse en el instrumento que el gobierno prometió para agilizar y facilitar el proceso de conseguir un permiso.
La aprobación de esta ley —seguida de un voluminoso reglamento— no ha producido los permisos rápidos que prometieron a los comerciantes y desarrolladores en la Isla, según han denunciado varios sectores.
De hecho, diversas asociaciones profesionales llegaron ayer a La Fortaleza para reunirse con la gobernadora Wanda Vázquez y reclamarle cambios adicionales a esta legislación que ya ha sido enmendada.
Jorge Argüelles, presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD), enumeró algunos de lo problemas que denunciaron ante la gobernadora: que la plataforma de permisos no funciona, que a los comercios que pretenden ampliar, se les piden los mismos documentos que a los nuevos; que extiendan el periodo de licencias como la que otorga el Departamento de Salud y que se uniforme el proceso de permisos en los municipios.
“Quisiéramos que —si se va a renovar por un mismo dueño— que el proceso sea transparente, porque si usted tiene una barbería y viene otro barbero, que sea cuestión de cambiar el nombre y no pasar por todo el proceso”, explicó. “Esto es lo más importante que hemos podido llevarle a la ejecutiva y ella se ha comprometido no solo a hacer una orden ejecutiva, sino a adelantar eso y vamos a tener reuniones de seguimiento”, añadió.
Este no es el primer compromiso de Vázquez para atender el problema persistente con la Ley para la Reforma del Proceso de Permisos.
En noviembre, la gobernadora anunció una orden administrativa que pretendía acelerar el tapón de 1,200 permisos únicos detenidos, incluyendo la entrega de permisos únicos provisionales.
Se han tenido avances
Manuel Laboy, secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), reconoció que el problema de los permisos no se ha resuelto, pero insistió en que han tenido avances. Dijo que se ha aminorado el tapón de permisos únicos pendientes de atender, aunque no ofreció las cifras oficiales.
“Se ha aliviado mucho. Hemos liberado la mayoría de esos permisos. No es una solución que resuelve todos los problemas, pero es un componente. No estamos donde tenemos que estar”, reconoció. “El permiso condicionado alivió unas cosas en particular y hay muchas cosas que tenemos que atender. El permiso condicionado alivia una parte”, señaló.
Reconoció que a la hora de mirar la legislación, tendrán que tomar en cuenta la evaluación de los mapas de calificación de suelos, otro tema que está ante la consideración de un grupo de trabajo del que el funcionario forma parte.
“En algún momento dado eso va a tener que converger (con la Ley de Permisos)”, expresó.
Requisitos en remojo
Laboy afirmó que todavía sigue bajo evaluación el requisito impuesto por la Ley de Permisos a los hogares de cuido extendido u hogares de ancianos. Estos negocios se quejaron de los requisitos de la nueva ley que les exige, por ejemplo, extintores de fuego con capacidad industrial.
Recordó que hay una dispensa hasta mayo para cumplir con esta ordenanza, en lo que se dilucida la controversia.
“Necesitamos el insumo de la industria y los especialistas en el tema para ver cómo se va a atender el asunto de la retroactividad y salvar la vida y la propiedad. Pero no puede ser oneroso y estamos buscando ese balance y la contestación la vamos a tener con el grupo de trabajo”, afirmó Laboy.