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  Por el libro
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26 de agosto de 2016

El Vocero

Durante la celebración de la asamblea de la Asociación de Agricultores, sus miembros avalaron investigar el acuerdo de 2013 entre el Departamento de Agricultura y Suiza Dairy Corporation, al entender se violó más de 15 leyes, lo cual recibió el compromiso de los seis aspirantes a la gobernación.

El acuerdo surgió ante el reclamo legal de las elaboradoras, ante la alegada pérdida, debido a las regulaciones de la industria lechera.

Héctor Cordero, presidente de la Asociación, sostuvo que este acuerdo le ha representado a la industria una merma de 15% desde entonces, y representa un desembolso de entre $15 millones a $20 millones para el fisco. Enfatizó que el acuerdo le representó a dos empresas cerca de $300 millones, de los cuales más del 50% “se lo despojaron” a los productores de leche, sin un estudio que avalara la medida.

“Este acuerdo se realizó de manera fraudulenta, ilegal y bajo treta y engaño. Por ello lo referiremos al Departamento de Justicia local, al FBI, a la Oficina de Ética Gubernamental y al Contralor de Puerto Rico, para su investigación  y el encausamiento de los responsables”, afirmó Cordero.

Ayer tarde, no fue posible una reacción de las elaboradora Suiza Dairy y Vaquería Tres Monjitas.

Otra de las resoluciones presentadas fue que se adopte el modelo cooperativo como vehículo de desarrollo para todos y cada uno de los sectores agrícolas. “Nuestra industria lechera ya ha organizado a sus productores en su cooperativa como paso inicial para su integración vertical. Ella vuelve a ser la punta de lanza y la líder que guiará a nuestros demás sectores agrícolas hacia la adopción del modelo organizativo de las cooperativas en Puerto Rico. Ese rumbo es el correcto. Debemos caminarlo todos juntos”, sostuvo.

Los aspirantes a la gobernación también apoyaron el cooperativismo para el sector.

Cordero indicó en su resolución que una de las actividades económicas más afectadas es la de industrias agropecuarias que requieren con urgencia una reestructuración organizacional. “La globalización de los mercados y la competencia que ella trae nos obliga a trabajar para eliminar estratas de costos de producción y de distribución. Tenemos que ser más efectivos para que nuestra producción agrícola sobreviva y florezca en este ambiente difícil y retante”, puntualizó.