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Olympus, que en el año fiscal 2011 que concluyó en marzo pasado registró una pérdida neta de 509 millones de dólares, busca posibles alianzas de capital con otras compañías niponas para enderezar su situación.

 

Por su parte, Panasonic está tratando de encontrar nuevas fuentes de ingresos a través de una alianza con el fabricante de equipos ópticos y médicos, lo que le proporcionaría otros áreas de crecimiento, después de reportar en el año fiscal 2011 una pérdida neta superior a los US$ 9.700 millones.

 

Además, Panasonic estudia despedir a la mitad del personal de sus sedes de Japón, que en la actualidad cuentan con unos 7.000 empleados, como parte de su plan de reestructuración en sus áreas de negocio de semiconductores y televisores.

 

Según aseguró la agencia de noticias japonesa Kyodo, Olympus le ofrecerá a Panasonic la posibilidad de comprar entre 381 y 636 millones de dólares en acciones.

 

La alianza le permitiría a Panasonic abastecer a Olympus de sensores y monitores de alta definición para sus endoscopios gastrointestinales, un producto en el que controla el 70% del mercado global, e impulsar el segmento de cámaras digitales que poseen ambas firmas.

 

Pero al margen de Panasonic, otros gigantes japoneses como Sony, Fujifilm y Terumo han mostrado su interés en realizar una alianza con Olympus. Aunque finalmente esta última se habría decidido por su unión estratégica con Panasonic para su expansión comercial, detalló Kyodo citando como informantes a fuentes cercanas a la negociación.

 

Olympus se encuentra en una delicada situación financiera luego de haber admitido en octubre pasado pérdidas encubiertas superiores a los US$ 1.100 millones, como consecuencia de malas inversiones realizadas desde la década del '90.

 

El caso salió a la luz pública con la denuncia del ex presidente de Olympus, Michael Woodford, que fue despedido a mediados de ese mes tras cuestionar ante la junta directiva adquisiciones pasadas y el pago de comisiones irregulares.