El Nuevo Herald
MEXICO (AP) — Las autoridades reguladoras mexicanas impusieron una multa de 28 millones de dólares contra la filial local del banco inglés HSBC por no haber evitado el lavado de dinero a través de cuentas de la institución, actividad que según una comisión del Senado de Estados Unidos alcanzó un volumen tan alto que debió incluir recursos ilícitos procedentes de las drogas.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) informó el miércoles que la filial en México del banco con sede en Londres ha pagado la multa, que equivale, agregó, a alrededor de la mitad de los beneficios anuales de la filial en 2011.
El organismo regulador y una comisión investigadora del Senado de Estados Unidos concluyeron que el banco internacional no controló los flujos sospechosos de miles de millones de dólares a través de sus cuentas y que no actuó con prontitud después de que se le advirtió sobre las colosales transacciones de dólares en efectivo en el banco.
Guillermo Babatz, presidente de la Comisión Bancaria, dijo que durante el pico de las transacciones, a mediados de la década del 2000, HSBC se había vuelto la fuente principal de transferencias bancarias de dólares en efectivo de México a Estados Unidos, al representar aproximadamente la mitad del flujo total, a pesar de que entonces no era uno de los bancos más grandes del país.
Babatz dijo que los reguladores detectaron las transacciones sospechosas y advirtieron a la administración local del banco en 2007 y 2008, pero que obtuvieron poca respuesta. Dijo que los reguladores tomaron a continuación la medida inusual de ponerse en contacto con la alta dirección del banco en sus oficinas centrales.
"Cuando contactamos a la casa matriz era porque teníamos un alto grado de preocupación, porque no teníamos respuesta (de la gerencia local)", cuyos representantes, agregó, "minimizaron los riesgos".
Las infracciones comenzaron en los primeros años de la década del 2000, informó la CNBV.
Una comisión investigadora del Senado de Estados Unidos dijo que en 2007 y 2008 la filial de HSBC en México envió al norte unos 7.000 millones de dólares en efectivo.
"Los envíos a granel de efectivo sólo podrían llegar a ese volumen si incluyeran los recursos ilícitos procedentes de las drogas", concluyó la comisión en un informe.
HSBC México reconoció en un comunicado que no reportó 39 transacciones sospechosas y que presentó tardíamente los informes de otras 1.729.
"HSBC México reconoce así que ha faltado al estricto cumplimiento de las disposiciones bancarias, así como con los estándares que reguladores y clientes esperan de la institución", dijo la filial mexicana en un comunicado.
La CNBV dijo que el banco comenzó a "tomar medidas internas drásticas y asertivas para corregir las infracciones" a finales de 2008. HSBC subrayó que en 2009 se volvió el primer banco mexicano en detener por completo el manejo de transacciones en efectivo en dólares.
En 2010, el gobierno impuso límites estrictos a las transacciones en efectivo en dólares estadounidenses en todos los bancos mexicanos, al limitar a los turistas y los residentes que no tienen cuentas en bancos en México la compraventa de un máximo de 1.500 dólares al mes.
HSBC México dijo que ha aplicado todas las recomendaciones de los reguladores, como reportar transacciones sospechosas, recabar más información de sus clientes y negarse a hacer transacciones con clientes que parecieran poco confiables.
"HSBC México lamenta que hechos realizados en el pasado, y que ya fueron corregidos, afecten su imagen el día de hoy", dijo el banco.
Babatz dijo anteriormente HSBC había apelado las multas que los reguladores habían logrado en los tribunales. No quedó claro de inmediato si el anuncio del miércoles marcó un cambio de esa política.
El presidente de la CNBV dijo que los detalles del escándalo surgieron públicamente por primera vez en el informe de la comisión del Senado estadounidense porque el marco jurídico de México "es un marco sumamente restrictivo" y no permite a los reguladores divulgar sus investigaciones o multas hasta que se hayan agotado todas las apelaciones.
Dijo que los bancos en México utilizaron un cabildeo intenso para obtener normas reguladoras favorables y opinó que esas reglas deban cambiarse porque ponen a las instituciones financieras a la ventaja, a costa de los reguladores.