Primera Hora
Los asientos de vehículos para niños tendrán que proteger por primera vez de muerte y de lesiones a los menores en choques de impacto lateral, según las nuevas normas propuestas por el gobierno estadounidense, conoció The Associated Press.
La Administración Nacional de Seguridad en las Carreteras Caminos de Estados Unidos (NHTSA) planea modificar las normas para que los asientos para niños de hasta 18,15 kilos (40 libras) sean sometidos a nuevas pruebas que simulen un choque de impacto lateral. La entidad considera que las reglas evitarán la muerte de aproximadamente cinco menores y lesiones de otros 64 al año.
Se espera que el director interino de la NHTSA, David Friedman, dé a conocer la propuesta el miércoles.
Según el plan, las nuevas pruebas simularán un choque lateral en el que la parte frontal de un vehículo que viaja a 30 mph impacta el lado de un pequeño vehículo de pasajeros que viaja a 15 mph. Durante las pruebas, el asiento para infantes será colocado en una unidad mientras otra impacta a la primera por el lado donde fue colocado el asiento, en lugar de usar vehículos en sí dado que el objetivo no es poner a prueba la capacidad de ciertos vehículos para resistir al impacto, indicaron funcionarios de la NHTSA.
Los estudios muestran que muchas muertes y lesiones de infantes en choques de impacto lateral son en autos con niños que se detiene en una intersección, generalmente un semáforo o una señal de alto, dijeron los funcionarios. Cuando el vehículo empieza a acelerar para cruzar la intersección, es impactado por un lado por otro vehículo que viaja a mayor velocidad por la vía transversal.
La prueba de impacto lateral —la primera en su tipo— simula tanto la aceleración del vehículo que impacta como el aplastamiento de la puerta del vehículo impactado hacia el asiento para infantes. Además de usar un muñeco para pruebas con las características de un menor de 12 meses y de antemano aprobado bajo las normas de la NHTSA, la prueba propuesta utilizará otro muñeco para pruebas de impacto lateral que representará a un niño de tres años.
"Como padre de dos niños, sé la tranquilidad que esta prueba ofrecerá a los padres", dijo el secretario de Transporte, Anthony Foxx, en un comunicado. La prueba "dará a las partes y a los fabricantes de los asientos para infantes nueva información importantes sobre la forma en que estos asientos funcionan en los choques de impacto lateral".