22 de julio de 2015
El Nuevo Dia
Para el presidente del Sector de Café de la Asociación de Agricultores, Edwin Soto, la nueva orden de precios del café emitida por el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) representa una “estocada al agricultor puertorriqueño”, ya que coloca al café importado con un precio menor que el café puertorriqueño.
Soto informó que impugnarán la orden en el tribunal federal y en el tribunal estatal debido a que “destruye el espíritu de la ley del arancel, pues el café importado va a ser más barato que el café local”.
“Esa orden es totalmente injusta para el agricultor y para la industria”, sostuvo Soto. Explicó que Ley Federal 77 de 5 de mayo de 1931 se estableció para proteger el cultivo local de café.
Soto manifestó que la orden no obliga a los elaboradores a la compra de café cultivado en Puerto Rico.
El empresario José González Freyre, que elabora el café Mami, dijo que “es una atrocidad que el gobierno se preste para importar café de México y subsidiarlo para hacerle así la competencia al café de Puerto Rico”.
Explicó que el café importado semi tostado que se vende se quedó en $322.76 el quintal de arábiga. Dicho café importado se vende, a través de la Administración para el Desarrollo de Empresas Agropecuarias (ADEA), a los torrefactores para cubrir la demanda existente, la cual no se suple del todo con grano cosechado aquí.
Pero según la nueva orden del DACO, los beneficiadores locales tienen que comprar el quintal de café local a los caficultores puertorriqueños a $379.98 el quintal.
Al establecer la orden que el café importado se quedará en $322.76, -$57.22 por debajo del café local- se está subsidiando el café de afuera. “El último precio en la subasta con México fue de $189.90, el quintal. A eso se le añade $250.00 del arancel federal, que se le devuelve a Puerto Rico, para un costo total para el café mexicano de $439.90. El gobierno luego lo vende al precio de semi tostado a $322.76, subsidiando el precio del importado por $117.14 el quintal”, afirmó González Freyre.
“Este subsidio debería ir al campo a mejorar las condiciones de este; y no para estimular la industria del café de México y darle una ventaja a Puerto Rico Coffee Roasters”, afirmó González Freyre. Soto opinó de manera similar.
Puerto Rico Coffee Roasters, que controla sobre el 80% del mercado y tiene las marcas Café Yaucono, Café Rico, Café Crema, Café Rioja, Café Encantos, Alto Grande, Adjuntas, Expresso y Yauco Selecto, informó que no emitiría ningún comentario sobre el tema de la orden de precios.
“¿Cómo alguien que compra café puertorriqueño va a competir con alguien que compra café importado, que además es subsidiado?”, cuestionó González Freyre.
Igualmente, el empresario sostuvo que “se está legislando a base de promesas de un tercero (PR Coffee Roasters) que afirmó no iba a subir los precios de la libra de café”.
“Aquí se legisló para beneficiar a PR Coffee Roasters que hace su café con café importado, protegiendo así ese monopolio que atenta contra el pequeño caficultor y los que compramos aquí en Puerto Rico”, dijo.
El Secretario del DACO, Nery Adames Soto, aclaró que la nueva orden de precios del café deja en manos de la libre competencia, el precio del café en los comercios.
Adames Soto dijo que representantes de PR Coffee Roasters le aseguraron que no habría cambios en los precios a nivel del consumidor.
“Hemos logrado un compromiso con sectores del mercado del café para que no suban el precio... Tenemos confianza de que el ciudadano continuará viendo los precios tal y como están. Sabemos que para los puertorriqueños el café es de suma importancia y queremos que lo consuma como hasta ahora lo ha hecho”, expresó Adames Soto.
Según Adames Soto, la orden del DACO cambia los precios mínimos que se pagan por el grano de café al agricultor y el precio a nivel de beneficiadores de café. “El precio al consumidor estará sujeto a la libre competencia, (el DACO) solo controla el precio a nivel del caficultor y del beneficiador”, explicó el Secretario.
Antes de que se diera esta orden de precios, el DACO regulaba el precio del café con composición de 60% primera y 40% segunda. La libra de café bajo control estaba en $4.45.
Sin embargo, no estaban regulados por el DACO los precios de los cafés: expreso, gourmet, selecto, descafeinado, instantáneo y premium, entre otros. Lo que implicaba que alrededor del 80% del total de marcas y variedades del café no estaban regulados.
Ahora ningún tipo café estará regulado, según el Secretario.
La industria del café abarca 22 municipios, produce unos 12,000 empleos y en 2014 significó un ingreso bruto para la Isla de $26.3 millones. Hay unos 88 beneficiadores y 56 torrefactores, según un informe legislativo.
“El DACO ha logrado un balance entre la industria del café y los consumidores. Unir ambos intereses ha sido un reto, pero el resultado de este esfuerzo es justo para la industria y sobre todo favorece al consumidor”, concluyó Adames sobre la orden.
La ley que requiere que se revise el precio del café cada cinco años, pero la última revisión había sido en 2006.