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  Por el libro
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La producción agrícola mundial necesita crecer un 60% antes de 2050 para cubrir las necesidades de una población más numerosa, más urbana y más rica, señala este miércoles un informe de la OCDE y de la FAO, que cuenta con el "gran granero" de América del Sur para conseguirlo.

Este crecimiento implica producir 1.000 millones de toneladas de cereales y 200 millones de toneladas de carne más por año con respecto a los niveles de 2007, según el informe de perspectivas agrícolas de la Organización para la Alimentación y la Agricultura de Naciones Unidas (FAO, por sus siglas en inglés) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Según ambas organizaciones el crecimiento de producción vendrá principalmente de los países emergentes como Brasil, China, Indonesia, Tailandia, Rusia o Ucrania, un aumento que sin embargo será menos importante que el de los últimos años.

En las últimas décadas, el crecimiento de la producción agrícola mundial superó el 2% anual pero, según las proyecciones del informe, se limitará en el futuro al 1,7% por año.

A pesar de esta ralentización, el incremento de la producción será superior al crecimiento demográfico, de manera que la producción por habitante seguirá aumentando 0,7% por año, según la OCDE y la FAO.

"El mensaje principal es que la seguridad alimentaria sigue siendo nuestra prioridad", dijo José Graziano da Silva, director general de la FAO. Según Da Silva, la buena noticia en América Latina es que, "especialmente América del Sur, se está convirtiendo en un gran granero" del mundo. "La productividad está creciendo también" en la región, comentó.

Estos cálculos no tienen en cuenta el crecimiento en el sector de biocarburantes, en el que los expertos prevén que se duplique la producción mundial de bioetanol y de biodiésel antes de 2021, concentrada principalmente en Brasil, Estados Unidos y la Unión Europea (UE), lo que implica el uso de más tierras que no se podrán utilizar para producir alimentos.

Según las proyecciones del informe, Brasil se convertirá en los próximos años en el segundo productor del mundo de etanol y en 2021 el etanol brasileño derivado de la caña de azúcar representará 51.000 millones de litros, es decir el 28% de la producción mundial.

La FAO y la OCDE también advierten que el aumento de la producción agrícola de los últimos años, facilitado por el incremento de tierras cultivadas y por el uso de abonos, entre otros, no podrá mantener el mismo ritmo en el futuro.

"El aumento de la productividad, el crecimiento verde y unos mercados más abiertos serán esenciales para poder atender las necesidades alimentarias y nutricionales de las generaciones futuras", aseguró el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, en un comunicado.

"Los gobiernos deben renunciar a las prácticas que distorsionan el comercio y crear un entorno favorable para una agricultura próspera y sostenible, apoyada por el aumento de la productividad", añadió.

Según el informe, un 25% de todas las tierras agrícolas están degradadas y subraya la necesidad de mejorar el uso sostenible de los recursos disponibles, como el suelo, el agua, los ecosistemas marinos, los bancos de peces, los bosques y la biodiversidad.

El informe de la FAO y la OCDE pide además que se refuerce la investigación para ayudar todavía más a las pequeñas explotaciones agrícolas pero también para reducir las pérdidas y los residuos y responder al aumento de la demanda.