15 de marzo de 2016
El Economista
El fabricante estadounidense de cosméticos Avon anunció este lunes la supresión de 2.500 puestos de trabajo y que transferirá su sede al Reino Unido, tras haber perdido gran parte de su negocio en América del Norte.
Esta reestructuración tiene por objetivo lograr un ahorro de hasta 70 millones de dólares en 2017, precisó en un comunicado.
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La nota no da detalles sobre las zonas afectadas, salvo que este plan toca diferentes regiones y varios sectores.
Aproximadamente 1.700 puestos serán eliminados este año, lo que resulta en una carga de 60 millones de dólares antes de descontar impuestos en las cuentas del primer trimestre. La mayor parte de esta carga se refiere a los pagos por despido.
Avon Products empleaba a 28.300 personas fuera de América del Norte (EE. UU., Canadá y México) a finales de 2015. En Wall Street, la acción subió más de 2% en las operaciones electrónicas de post-sesión.
El grupo no dio ninguna fecha exacta para su reubicación en Reino Unido, uno de los países con política impositiva más flexible que en Estados Unidos. Sólo dijo que esto se hará en un tiempo.
Sin embargo, Avon mantendrá sus sitios Suffern y Rye en el Estado de Nueva York y continuará en la cotización de Wall Street en la plataforma de intercambios NYSE bajo el símbolo "AVP".
La compañía había vendido el 80,1% de sus operaciones en América del Norte en diciembre al fondo de inversión Cerberus por 170 millones de dólares, como parte de un plan estratégico para ahorrar 350 millones de dólares y así mejorar su situación financiera después de tres años de pérdidas continuas.
Su acción sobre el mercado de valores de Nueva York se desplomó: ahora se negocia a unos 4 dólares luego de cotizarse a 35 dólares en 2010.
