21 de febrero de 2011
El Nuevo Dia
Christine Barney, ejecutiva de Miami, prohibió el mes pasado a los empleados de su agencia de relaciones públicas verificar y enviar textos cuando manejan, después de ver cómo un chofer hablando por teléfono móvil chocaba contra otro coche. La firma de Barney se sumó a empresas como Exxon Mobil Corp., Zurich Financial Services AG y FedEx Corp., que han prohibido a sus empleados verificar o enviar mensajes cuando van al volante. La agencia de seguridad del de EEUU ha advertido a los empleadores que pueden ser multaods por permitir la verificación o el envío de textos, y algunas empresas están yendo más lejos todavía prohibiendo a los conductores usar dispositivos móviles. ``Muchas empresas como la mía esperan que los empleados estén disponibles las 24 horas del día los 7 días de la semana', dijo Barney, máxima responsable ejecutiva de la sociedad rbb Public Relations, cuyos empleados firman una promesa de no usar teléfonos manuales, comer o maquillarse mientras conducen. ``Son muchas las empresas que alientan a los empleados a transformar el auto en su segunda oficina'. La Dirección de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA) estadounidense se unió al Departamento de Transporte el 4 de octubre para combatir una ``epidemia' de distracciones, como se la llama. La OSHA dijo que podría multar a las empresas por riesgos para la seguridad del lugar de trabajo si permiten que sus trabajadores verifiquen o envíen textos y conduzcan. Las penalidades pueden llegar hasta $7,000 por una violación susceptible de provocar una lesión significativa y $70,000 cuando un empleador no elimina una violación reconocida o viola intencionalmente la norma. El secretario de Transporte, Ray LaHood, lanzó una campaña contra la distracción al conducir, incluidos los mensajes de texto, en septiembre de 2009. Un mes más tarde, el presidente Barack Obama prohibió a los empleados federales verificar o enviar mensajes de texto mientras conducen. La administración también ordenó a los organismos que agreguen estipulaciones alentando a los receptores de contratos federales a prohibir los mensajes de texto para los conductores.