18 de febrero de 2011

La Opinion

Las cajas de credito de California están en pie de guerra contra el plan de fijar un tope a los recargos que empresas como Visa y Master Card aplican cada vez que un negocio o tienda se cobra con una tarjeta de crédito (credit unions).

La Asociación de Cajas de Crédito del estado alega que el sistema de recargos beneficia tanto a los negocios detallistas como los consumidores, y ha advertido que la imposición de un techo conducirá a la eliminacion de las cuentas de cheques gratuitas de parte de los bancos, y otros recargos a los consumidores.

Las cuotas por cada transacción con tarjeta de débito, aproximadamente el 1% del monto total, son establecidas por Visa Inc. y MasterCard Inc. La idea de ponerles un límite tiene el apoyo de las asociaciones que representan a los negocios detallistas y los pequeños empresarios, así como de los grupos de defensa del consumidor.

Las cajas de crédito han pedido al Congreso que posterge la implementación de las reglas por un año para estudiar su posible impacto.

"Se ha adoptado una ley similar en Australia y los resultados muestran que los consumidores no recibieron ningún beneficio, y que más bien los negocios se embolsaron el dinero", alegó Bob Arnould, vicepresidente a cargo de asuntos de gobierno de la Liga de Cajas de Crédito de California y Nevada.

Según Arnould, el proyecto para limitar los recargos a las tárjetas de débito no fue debidamente discutido en el Congreso. Agregó que la eliminacion de las cuentas de cheque gratuitas perjudicarán especialmente a las personas de bajos y moderados ingresos.

Aproximadamente 100 millones de estadounidenses están afiliados a cajas de crédito.

El autor del proyecto para techar los recargos por transacciones de débito es el senador Richard Durbin, de Illinois. En una carta enviada a la Asociación de Banqueros Estadounidenses (ABA), el legislador declaró que los recargos de tarjetas de crédito son muy lucrativas para los bancos, pero no para los consumidores, que "pagan decenas de miles de millones de dólares al año en sumas que les son transferidas [por el comercio al detalle] en forma de precios más altos".

"Muchos tenderos argumentan que los recargos deben ser prohibidos en el sístema de débito tal como ocurre en el sistema de cheques", dice en su mensaje.

Lucía Moreno-Linares, directora ejecutiva de Family Federal Credit Union, asegura que son los vendedores, y no los consumidores los que pagan el recargo.

"No hay nada en la enmienda que diga que ahora que los consumidores van a pagar 44 centavos menos por lo que compran, ahora vayan a tener un ahorro en lo que compran", dijo.

En su misiva a la ABA, Durbin recriminó a la ABA por lo que según él es una campaña de la banca para desinformar a los consumidores sobre la naturaleza del techo a las transacciones de débito.