4 de febrero de 2011
El Nuevo Herald
LONDRES -- Las tasas de obesidad en el mundo se han duplicado en las tres últimas décadas pese a que han disminuido los niveles de hipertensión sanguínea y colesterol, según nuevas investigaciones. Los pobladores de regiones insulares del Pacífico, como Samoa Estadounidense, son los más pesados, revela el estudio. Entre los países en desarrollo, los estadounidenses son los más gordos y los japoneses los más delgados. "Ser obeso ya no es más un problema exclusivamente occidental", dijo Majid Ezzati, profesor de salud pública en el Imperial College de Londres, uno de los autores del estudio. En 1980, un 5% de varones y 8% de mujeres en el mundo eran obesos. Para 2008, las tasas habían subido casi el 10% para los varones y 14% para las mujeres. Eso significa que 205 millones de hombres y 297 millones de mujeres eran obesos. Además, 1.500 millones de adultos estaban excedidos de peso, según el estudio. Aunque los países ricos lograban controlar mejor los niveles de hipertensión y colesterol, los investigadores dijeron que gente de todo el mundo está engordando, excepto en unos pocos sitios como el centro del Africa y el sur del Asia. Los estudios se publican el viernes en la revista médica Lancet. La investigación confirma tendencias registradas anteriormente sobre la creciente obesidad y los tres informes suministran el panorama más amplio sobre el índice de masa corporal, colesterol y presión sanguínea. Dicho índice es una medida basada en el peso y la altura. Los expertos advirtieron que el número creciente de gente obesa podría conducir a "un maremoto global de enfermedades cardiovasculares". En un comentario adjunto, Sonia Anand y Salim Yusuf de la Universidad McMaster en Hamilton, Ontario, Canadá, dijeron que el pronóstico mundial de enfermedad cardíaca era "desalentador" por incluir "una emergencia poblacional que costará decenas de millones de muertes evitables" a menos que las naciones actúen rápidamente. Ezzati dijo que también están engordando las poblaciones de partes de Latinoamérica, Oriente Medio y Africa occidental y sur. Entre los países ricos, Estados Unidos tenía el mayor promedio de índice de masa corporal con 28. La tasa más baja era de Japón, del 22 para las mujeres y 24 para los varones. Las personas con un IMC de 18-24 están consideradas de peso saludable. Las de 25 o más son excedidas de peso y 30 ó más son obesas.