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  Por el libro
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29 de diciembre de 2010

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Nueva York, 28 dic (EFE).- La aseguradora Allstate ha demandado a Bank of America por la venta que hizo su filial Countrywide de activos respaldados por hipotecas por 700 millones de dólares, al considerar que cuando ésta se los vendió ya sabía que había grandes posibilidades de que su valor descendiera con fuerza.

A través de un comunicado, Allstate afirmó hoy que la demanda fue presentada el lunes en el Tribunal Federal del Distrito Sur de Nueva York e incluye también a la propia Countrywide, que fue la que comercializó esos activos entre 2005 y 2007, antes de que estallara la crisis financiera ligada a este tipo de instrumentos de deuda y de que fuera comprada por Bank of America en 2008.

Según la aseguradora -que no detalla la suma que pretende recuperar en concepto de daños-, Countrywide ya era consciente de que muchos de los préstamos con los que estaban respaldados los activos que comercializaba se correspondían con hipotecas que acumulaban importantes historiales de impagos.

"Desafortunadamente, esto parece ser una situación en la que un sofisticado inversor busca a alguien a quien culpar de la desaceleración económica y de las pérdidas derivadas de una inversión", dijo Bank of America en otro comunicado.

El pasado octubre el mayor banco por activos de Estados Unidos se vio también afectado por el anuncio de un grupo de inversores de que preparaba una demanda contra él por la comercialización de bonos respaldados por hipotecas que, en su opinión, no ofrecían la seguridad prometida.

En situación similar se encuentran también otros grandes bancos estadounidenses, que han sido acusados de haber vendido activos de alto riesgo siendo conscientes de que su valor podía desplomarse en cualquier momento.

También en octubre, tres antiguos ejecutivos de Countrywide alcanzaron un acuerdo extrajudicial multimillonario para evitar acudir a los tribunales por un caso de fraude relacionado igualmente con la excesiva comercialización de activos vinculados a hipotecas de alto riesgo.

Entre ellos, Angelo Mozilo, ex presidente y cofundador de esa firma financiera, aceptó pagar 22,5 millones de dólares en multas a la Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés) y devolver 45 millones de dólares en ganancias ilegales a los que fueron accionistas de la compañía.