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  Por el libro
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28 de diciembre de 2010

El Nuevo Herald

Cuando una de las mayores empresas de construcción de viviendas en el sur de la Florida recibió un permiso federal hace siete años para una urbanización llamada Islands of Doral, le impusieron condiciones.

Para compensar la destrucción de 415 acres de pantanos infestados de maleleuca en el oeste del Condado Miami-Dade, Century Homebuilders accedió a destinar otros 47 acres a crear una reserva de tierras húmedas, eliminando las especies exóticas y remplazándolas con plantas nativas.

Century nunca terminó la tarea.

Según los términos de un acuerdo aprobado este mes por el juez federal de distrito James Lawrence King en Miami, la urbanizadora tiene que concluir lo prometido y pagar una multa de $400,000 y $60,000 por concepto de cargos normativos: una penalidad inusitadamente dura en un caso de infracción de normas sobre terrenos pantanosos.

Ignacio Moreno, secretario de Justicia adjunto encargado de la División del Ambiente y Recursos Naturales, expresó en una declaración que el caso mostraba el compromiso del gobierno federal de hacer cumplir las leyes de protección de terrenos pantanosos.

``La sustancial penalidad y otras compensaciones obtenidas en este caso subrayan el mensaje para todos los urbanizadores de que deben cumplir todas las cláusulas de los permisos', expresó Moreno en una declaración.

Los ejecutivos de Century --el presidente de la compañía, Sergio Pino, que firmó el acuerdo llamado ``decreto de consentimiento', y César Llano, vicepresidente de urbanización-- no respondieron a varios mensajes telefónicos dejados en las últimas semanas. Tampoco lo hizo Mitchell Widom, abogado de Miami que representó a la compañía en el caso federal civil presentado en diciembre pasado por el Departamento de Justicia en nombre del Cuerpo de Ingenieros del Ejército.

En su respuesta, la compañía admitió que no había hecho gran cosa para cumplir su compromiso de remplazar las tierras húmedas urbanizadas, como lo exigía el permiso del Cuerpo, que incluía la eliminación de plantas invasivas, la construcción de bermas de protección y la siembra de más de 100,000 plantas nativas. Pero no ofreció explicaciones y además negó muchas de las infracciones, como que rellenó ilegalmente un acre del terreno que debió dedicar a crear la reserva con piedras para construir el reparto.

El acuerdo, mencionando evidencias de los urbanizadores sobre ``los límites de su capacidad de pagar', le da a la compañía dos años para pagar la multa de $400,000 --$50,000 dentro de seis meses, otros $180,000 para el 1 de octubre de 2011, y $170,000 para el siguiente 1 de octubre. Además, Century tiene que comprar $60,000 en ``créditos de mitigación' de terrenos pantanosos, que se aplicarán a un proyecto de restauración de pantanos actualmente en marcha en el Parque Nacional de los Everglades.

El Cuerpo ha sido criticado durante años por defensores del medio ambiente, y por agencias del Congreso y del gobierno por su floja supervisión de los llamados proyectos de ``mitigación'. Los proyectos de mitigación se proponen contrarrestar la urbanización de los terrenos pantanosos mejorando la calidad ambiental de otros sitios, o incluso creando nuevos terrenospantanosos.

En el 2005, la Oficina de Responsabilidad del Gobierno de Estados Unidos emitió un informe según el cual el Cuerpo realizó un trabajo deficiente en verificar si los urbanizadores realizaban las obras prometidas, y raramente inspeccionó los terrenos húmedos restaurados o construidos. En el 2008, el Cuerpo emitió una directiva que renovaba su política, para exigir inspecciones e informes más frecuentes en los proyectos de mitigación para terrenos húmedos.

En una respuesta escrita a preguntas enviadas por correo electrónico, el distrito de Jacksonville del Cuerpo dijo que sacó a relucir por primera vez el trabajo incompleto de Century en el 2006, ``y que trató de resolver informalmente la situación de incumplimiento durante los tres años siguientes'.

La multa está entre las mayores impuestas por el Cuerpo en años recientes, al menos en la Florida. En el 2009, el Cuerpo impuso a un urbanizador del área de Tampa una multa de $300,000 y una suspensión de obras de 18 meses por eliminar un acre de terreno húmedo poblado de vegetación y lanzar desechos lodosos en un arroyo que desemboca en el río Hillsborough, una de las fuentes principales de agua potable de Tampa.

Royal Gardner, vicedecano de Derecho de la Universidad Stetson, en Gulfport, y ex abogado del Cuerpo especializado en tierras húmedas, dijo en un mensaje electrónico que en el pasado la entidad se concentró en tierras húmedas cubiertas ilegalmente.

Los casos contra urbanizadores que no cumplieron sus sus proyectos de mitigación eran raros, dijo.

``Si esta es una multa por dejar de cumplir una mitigación, entonces yo la caracterizo como una penalidad significativa y un gran precedente para futuras decisiones jurídicas', dijo.