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  Por el libro
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30 de noviembre de 2010

El Nuevo Dia

Los abonados de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) recibirán una factura más alta en diciembre y enero debido a que se añadirá el incremento por el uso de adornos de Navidad y el consumo de los encendidos navideños que se realizan en la mayoría de los municipios del País.

Así lo aseguró hoy el presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), ángel Figueroa Jaramillo.

"Tenemos que hacernos conscientes, sobre todo en este momento de estrechez económica, que toda la energía eléctrica que se consume, incluyendo la utilizada por los municipios, se reflejará en nuestra facturas individuales", señaló Figueroa Jaramillo.

Según el dirigente, "los municipios no pagan a la Autoridad de Energía Eléctrica por el consumo de electricidad".

Añadió que "esta realidad los lleva a que cada año es mayor la cantidad de adornos iluminados que se instalan y como resultado es mayor el consumo que terminamos pagando todos los abonados, ya que este consumo pasará a formar parte de los elementos a considerar en la ya conocida fórmula que da lugar a la partida del ajuste por combustible".

Figueroa Jaramillo dijo que en el presupuesto operacional de la AEE hay una partida por 244 millones de dólares que está destinada para subsidiar el gasto por consumo de energía de los municipios.

Para el sindicalista, la eliminación de este subsidio en lugar de impuestos a que está obligada por ley la AEE podría significar una reducción inmediata de aproximadamente dos por ciento de nuestras facturas individuales.

"En múltiples ocasiones nuestro sindicato ha hecho un llamamiento a la necesidad que tenemos en el país de aprender a ser más racionales en el consumo de energía. No constituye el mejor ejemplo para los abonados la política actual que da mano libre a los municipios para consumir electricidad sin la responsabilidad de tener que pagar por la misma", afirmó.

A su vez, opinó que "también resulta bochornoso que mientras se gastan millones de dólares en una campaña mediática para impulsar un gasoducto que en nada beneficiará al país, ni al consumidor en sus bolsillos, no se gaste un solo centavo en promover el ahorro de energía. Así de disparatada es la actual política energética del gobierno de turno".