11 de noviembre de 2010
El Nuevo Dia
El puertorriqueño está comiendo menos, a juzgar por la reducción de casi $300 millones en ventas de alimentos que han experimentado los comercios en los primeros seis meses del año. Según las cifras de la Compañía de Comercio y Exportación, las tiendas de alimentos reportaron ventas totales de $3,045.5 millones, de enero a junio de 2010, lo que representa una disminución de 9% ($295.7 millones) al compararlas con las de ese mismo periodo en el 2009. La explicación para esta merma en ventas, según el economista Juan Castañer de la firma Estudios Técnicos, no necesariamente es que la gente esté comiendo menos, sino a que existe una gran competencia de precios entre los comercios, y a que los consumidores están comprando productos más económicos. "El consumidor está defendiendo su dólar, y la industria está reaccionando a esta nueva realidad económica con precios bien competitivos", dijo Gualberto Rodríguez, presidente de la Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA) Sube la salida a comer fuera Sin embargo, contrario a la creencia que tenían muchos, las ventas en restaurantes y cafeterías no han corrido la misma suerte que los supermercados. En los establecimientos de comida preparada, el consumo se ha mantenido estable este año, con un alza de 2%. Castañer reconoció que la industria de alimentos está todavía afectada económicamente. Sus ventas no crecen, ni tampoco lo hace el empleo. Por el contrario, los empleos siguen reduciéndose y en agosto pasado estaban en 110,000, mientras en el 2005 sumaban 119,200. En apenas un año, la industria ha perdido 1,911 puestos, y en los supermercados la pérdida es mayor, con 3,600 empleos menos. Para conocer cuán confiados están los miembros de la industria de alimentos con el panorama económico, MIDA le encomendó a Estudios Técnicos que hiciera una encuesta entre socios y no socios de la entidad. Ayer se dieron a conocer los datos de esa encuesta para los meses de julio a septiembre, en los que se entrevistaron a 233 empresas. En verano se dieron a conocer los datos de los primeros meses del año 2010. El índice de Sentimiento de Confianza reflejó que el 52% de los entrevistados tuvo una disminución en las ventas de su negocio en los pasados tres meses. Sólo un 9% reportó incremento en ventas en ese periodo. Esta vez hubo más negocios con bajas en ventas, ya que el trimestre anterior el porcentaje fue de 50%. Los niveles de inventario y la demanda de bienes y servicios es suficiente o adecuada para más del 60% de los entrevistados. Asimismo, en los pasados tres meses, una tercera parte de los encuestados redujo el nivel de empleo, mientras el 58% la mantuvo igual. "En términos generales, su situación actual sigue siendo menos optimista", dijo Castañer. Cómo perciben el futuro Preguntados sobre qué esperan para los próximos tres meses en cuanto al volumen de ventas, el 67% respondió que aumentarán. No obstante, para los economistas Castañer y Joaquín Villamil, así como para el presidente de MIDA, el optimismo de los entrevistados puede deberse a que los próximos tres meses -octubre, noviembre y diciembre- son los de mayor venta en el año debido a que está el Día de Acción de Gracias y las festividades navideñas. En cuanto a los empleos, la mayoría (73%) no espera aumentar la plantilla durante ese periodo de tiempo. Sólo un 19% dijo que contratará más gente. Al indagar sobre cómo creen que estará la economía más a largo plazo, de aquí a un año, un 35% opina que estará mejor. Ese porcentaje subió, pues el trimestre pasado era apenas un 24%. Un 39% dijo que la economía permanecerá igual y un 26% piensa que estará peor. Sin embargo, al clasificar las respuestas en términos de socios y no socios de MIDA, los primeros resultaron sentirse más optimistas que los no socios. Un 78% de los socios contestó que la economía estará igual o mejor en un año, en contraste con un 73.5% de los no socios que opinó de esa manera. El aumento en los costos fue el factor que más afectó las operaciones de los entrevistados (76%), seguido por la competencia (45%). Para menos del 1% el problema radica en el Gobierno.