24 de septiembre de 2010
El Vocero
El Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín integra ya la lista de 58 puertos de trasbordo de Estados Unidos que utilizan una máquina de rayos x, que tiene la capacidad de detectar objetos peligrosos ocultos, a fin de proteger a los viajeros de actos de terrorismo. Así lo anunció ayer el director de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA, por sus siglas en inglés), José Vaquero, durante una rueda de prensa en la que participó el superintendente de la Policía, José Figueroa Sancha y el director ejecutivo de la Autoridad de los Puertos, Alberto Escudero. "Estas máquinas utilizan rayos x para crear una imagen del cuerpo de la persona y detectar si tiene un objeto peligroso que puede ser un riesgo para los viajeros. Lo mismo detecta si tiene artículos prohibidos, incluyendo armas y explosivos, debajo de su ropa sin tener que tener contacto físico con ellos", informó Vaquero. El sistema es conocido como Tecnología Avanzada de Imágenes (AIT, por sus siglas en inglés). El equipo cumple con los requerimientos de salud de la "American National Standard for Radiation Safety". El mismo fue evaluado por la Agencia Federal de Drogas y Alimentos (FDA) y por el Instituto Nacional de Estándares de Tecnología de la Universidad John Hopkins. El director de relaciones públicas de TSA, Luis Casanova, indicó que el equipo tiene un nivel de radiación más baja que la que irradia un teléfono celular. Vaquero destacó que el proceso es voluntario y que si alguna persona se opone a someterse a los rayos x, sería expuesto a la máquina de detección de metales y a un registro físico. Este equipo no detecta sustancias controladas en el interior del cuerpo de los pasajeros. Aseguró que han tomados las medidas de privacidad de los pasajeros. Sobre el particular, explicó que hay dos oficiales que participan en el proceso, uno es el que está frente a la máquina el cual instruye a los pasajeros a remover sus pertenencias metálicas, líquidos, entre otros y el operador de la máquina que ve la imagen del pasajero en una pantalla ubicada en un cuarto cerrado. Ese oficial no tiene acceso visual al pasajero. Aclaró que el equipo no tiene la capacidad de grabar ni trasmitir la imagen. Tampoco se puede imprimir ni retener la misma. "Nosotros también hemos trabajado con los grupo que abogan por la privacidad de las personas y nos esforzamos por proteger su privacidad. A esos efectos hemos tomados varias medidas que aseguran la privacidad de las personas que aseguran este equipo. La imagen no se guarda, ni se transmite ni se puede sacar copia por lo que no se puede entrar celulares ni maquinas en el cuarto", declaró Vaquero. Al momento, se han instalado 58 de estas máquinas en los 450 aeropuertos a través de Estados Unidos.