16 de septiembre de 2010
El Nuevo Herald
Los bancos están confiscando viviendas en problemas con un ritmo cada vez más rápido, pero menos viviendas están cayendo en mora, una señal de que la crisis de las ejecuciones hipotecarias ha entrado en una nueva fase. En agosto, los prestamistas reclamaron 4,417 viviendas en el sur de Florida, 96.7% más que en agosto del 2009, cuando los bancos incautaron 2,246, según un informe publicado el jueves por RealtyTrac. A la vez, los nuevos embargos bajaron 52% a 6,899. A medida qwe los bancos reclaman más viviendas en el estado final del proceso de ejecución, tendrán que acabar soltándolas en el ya abarrotado mercado de reventa. En la clásica ecuación de oferta y demanda, el inventario adicional empuja los precios y el valor de la vivienda hacia abajo, un fenómeno que los analistas de bienes raíces han pronosticado recientemente a medida que el nivel de los inventarios locales comenzó a subir en los últimos cuatro meses. Observadores de la industria discutieron un potencial nuevo desplome en el mercado de la vivienda durante un panel de bienes raíces organizado por Condo Vultures en Miami esta semana, que debatió tanto las probabilidades de mayores caídas en los precios, como la posibilidad de que el sur de la Florida ya haya tocado fondo. ``Las dos opciones parecen igualmente posibles', dijo Peter Zalewski, jefe de la agencia de asesoría Condo Vultures, radicada en BalHarbour. ``¿Se está estabilizando el mercado? ¿Estamos en camino a un nuevo desplome?' La situación del mercado es difícil de descifrar debido a que los datos mezclan indicaciones tanto positivas como negativas. Por ejemplo, el informe de ejecuciones hipotecarias del jueves mostró que, aunque las confiscaciones de los bancos van en aumento, las nuevas ejecuciones hipotecarias han disminuido considerablemente, y menos propietarios de vivienda están recibiendo cartas de ``notificación de mora'. Esto podría significar que el primer paso del proceso de ejecuciones hipotecarias ya ha llegado a su punto máximo. Año por año, la actividad general de ejecuciones hipotecarias en los condados de Miami-Dade, Broward y Palm Beach disminuyó un 5.5 por ciento en agosto, a 21,927. Durante la sesión del panel, William Hardin, profesor de Finanzas y Bienes Raíces de la Universidad Internacional de la Florida, señaló los datos que comparan el número de nuevas ejecuciones presentadas en un mes dado con el número de ventas cerradas. En un mercado normal, dijo, esa proporción debería ser de alrededor de 2 a 100. ``Hoy en día, en muchos mercados del sur de la Florida, es casi del 100 por ciento: por cada venta, hay una nueva presentación de ejecución hipotecaria', dijo.