3 de septiembre de 2010
El Economista
Los Angeles.- La farmacéutica Eli Lilly and Co perdió el jueves un caso de patentes, lo que allana el camino para que rivales produzcan versiones genéricas de su medicamento para el déficit atencional Strattera. El laboratorio bajó, en consecuencia, sus perspectivas de crecimiento de los ingresos para el 2010. La corte estadounidense de distrito de Nueva Jersey dictaminó que el método de uso de la patente de Strattera por parte de Lilly LLY.N, que vencía en el 2017, era inválido. "Estamos en rotundo desacuerdo con el dictamen de la corte de distrito y apelaremos la decisión", dijo Robert Armitage, abogado jefe de Lilly en un comunicado. Lilly no modificó sus previsiones de ganancias para todo el 2010, pero dijo que ahora espera un crecimiento de los ingresos cerca o bajo un 5%, menos que sus pronósticos previos de un crecimiento en torno al 5 por ciento. Lilly también dijo que planea reducir sus costos en al menos 1.000 millones de dólares hacia finales del 2011 y reducir su fuerza laboral.