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  Por el libro
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23 de julio de 2010

Primera Hora

El presidente Barack Obama firmó hoy, jueves, un proyecto de ley que se propone reducir en 50,000 millones el dinero del gobierno pagado indebidamente a muertos, prófugos y presos que no tienen derecho a recibir beneficios.

Ese objetivo, de concretarse, ni siquiera reduciría a la mitad los $110,000 millones derrochados el año pasado.

La nueva ley apoyará los esfuerzos de las agencias federales para poner fin a la salida indebida de dinero de varios modos. Uno de ellos es el requisito de más auditorías de programas y penas adicionales a las agencias que no cumplan con la ley. La legislación también amplía el alcance de la inversión del dinero recuperado.

Obama decidió firmar el proyecto ante las cámaras en la Casa Blanca para llamar la atención sobre la nueva ley.

El presidente agregó que el objetivo definitivo es poner fin a todo pago indebido.

"Tenemos que cuestionar una situación que acepta el desperdicio de miles de millones de dólares", afirmó.

Los pagos indebidos van desde fraude hasta el pago de cheques a quienes no corresponde, o por cantidades equivocadas debido a un error tipográfico. El presidente dijo que cada dólar recuperado debería asignarse a la ayuda para pagar la universidad, beneficios para los militares y muchos otros usos legítimos.