27 de junio de 2010
Yahoo
WASHINGTON (AP) - En el turbio mundo de la internet, ¿cómo sabe uno con quién está hablando, a quién le compra algo o si su banco puede realmente determinar quién entra a pedir información sobre su cuenta? En medio de crecientes instancias de robo de identidad, violaciones de cuentas bancarias y sofisticadas estafas en la internet, el gobierno está buscando formas para volver más seguras esas transacciones en el ciberespacio. Pero las autoridades deben tener cuidado, pues las gestiones para crear tarjetas de identificación, certificados personales y otros sistemas de identificadores crea preocupaciones de privacidad y temores de que el gobierno está vigilando a sus ciudadanos en la internet. En un plan preliminar dado a conocer el viernes, la Casa Blanca presentó su argumento por un sistema voluntario de identificación y estableció un portal en la internet para colectar opiniones y recomendaciones de expertos y usuarios sobre cómo debería quedar estructurado. El sitio ya estaba recibiendo votos, comentarios y sugerencias el viernes por la tarde, subrayando la naturaleza controversial de cualquier discusión sobre regulación de la internet. "La tecnología que ha traído tantos beneficios a nuestra sociedad y nos ha dado tanto poder también ha dado poder a quienes desean causar daño", dijo el coordinador de la Casa Blanca para asuntos de la internet, Howard Schmidt, en un mensaje en su blog sobre la necesidad de mayor seguridad en la red. El plan, dijo, busca un futuro en el que la gente podrá obtener un identificador seguro _ como una tarjeta de identificación o un certificado digital _ de una serie de servicios de la internet. Los usuarios podrán entonces probar quiénes son cuando realizan sus transacciones en la internet. "La autentificación ha sido el objetivo central de la política de seguridad en la internet desde inicios de los 90", dijo James Lewis, experto en seguridad cibernética y miembro del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales. Esta última gestión tiene más probabilidades de éxito que las previas, "pero necesitamos ver cuánta oposición genera y si la gente realmente la usa si es implementada".