14 de junio de 2010
La Opinion
FINANZAS PERSONALES Aunque quizás no sientas preocupación respecto a tu situación económica en general, deberías tener en cuenta una cifra muy sencilla: si tus deudas de consumo exceden el 20% de tus ingresos mensuales, es probable que en poco tiempo pongas en peligro tu solvencia financiera, aunque parezca que, a primera vista, todo anda bien. Los problemas de crédito son acumulativos y, según las estadísticas, demoran alrededor de cinco años en manifestarse. Tampoco vas a poder resolverlos en pocas se- manas. Debes desconfiar de cualquiera que te prometa una solución rá- pida o te pida pagos por adelantado. Esas agencias casi siempre ofrecen cosas que no pueden conseguir. Por ejemplo, si hay problemas reales con el manejo del crédito, no existe una manera legal de enmendarlo; y si hay errores, no es necesario gastar para que alguien haga lo que tú mismo puedes hacer. Muchos expertos recomiendan que cada 90 días se revise el historial crediticio, pues siempre pueden haber errores y atrasos en las actualizaciones. Asómbrate: ¡el 79% de los reportes de crédito en Estados Unidos tienen errores, y un 25% de ellos tan graves como para que te nieguen un préstamo! Además, está el peligro del robo de identidades, cada vez más común. Cuatro letras importantes: FICO Por suerte, dispones de dos recursos que pueden anticiparte cualquier problema: tu reporte de crédito y el índice FICO. La mayoría de las solicitudes de crédito se deciden con la ayuda de este índice, un puntaje que oscila entre 300 y 850 puntos (el promedio en EEUU es 723). Una puntuación alta quiere decir que eres responsable manejando tus deudas, por lo que podrás beneficiarte de la competencia entre los prestamistas. Esto te permite obtener mejores intereses y condiciones de pago. Pero aún cuando no vayas a comprar nada, este índice puede ser de inestimable ayuda para eva- luar la salud de tus finanzas personales. Tú sabes que mejorar tu crédito es importante y es probable que si has comprado un auto o una casa, tengas cierta noción de tu índice FICO y tal vez hasta una copia de tu reporte de crédito. Si no, es hora de que pidas uno. Puedes ha- cerlo gratis entrando al sitio www.annualcreditreport.com. Si encuentras errores, escríbeles una carta a cada uno de los tres burós (Experian, TransUnion y Equifax) exigiendo una investigación sobre este problema. Ellos tienen entre 30 y 45 días para investigar. Los burós mencionados deben proveerte un reporte anual gratuito que no incluye el cálculo del FICO, y aunque este reporte sin costo puede ser una excelente he- rramienta para tener una primera visión de tus cuentas o para monito- rearlas, si prefieres un informe más completo, en www.myfico.com puedes solicitar por un precio modesto un reporte de las tres agencias, con tus respectivos puntajes, e imprimirlo en cuestión de minutos. Con este reporte detallado en la mano vas a saber si tus acreedores consideran que tienes problemas de crédito y, si es así, podrás establecer algunas pautas para mejorarlo. Si ya tenías crédito y lo perdiste… >> Trata de no crearte deudas adicionales y paga a tiempo tu hipoteca o renta, y los gastos, como los de electricidad y teléfono, para que no empeore tu situación ante el buró de crédito. >> Si acaso lograste salvar una tarjeta de crédito, úsala para gastos pequeños y paga enseguida la deuda. >> Cuando hayan pasado de seis meses a un año, solicita una tarjeta de crédito asegurada que tenga un límite igual a la cantidad de dinero que tienes que depositar en una cuenta especial. >> Busca buenas tasas de interés y asegúrate de que el banco informe al buró de crédito que estás manejando esa cuenta con eficiencia. >> Al cabo de uno o dos años, si tu cuenta de banco está en orden y has pagado tus facturas a tiempo, es casi seguro que te llegarán mejores ofertas de tarjetas aseguradas, pero no caigas otra vez en la trampa del crédito. Al principio tus tasas de interés serán altas, pero si te esfuerzas por liquidar la deuda a fin de mes las evitarás. Mientras más consecuente seas con ese tipo de comportamiento, más instituciones estarán dispuestas a ayudarte con tus finanzas otra vez. Asegúrate de no tropezar de nuevo con la misma piedra.