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  Por el libro
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27 de abril de 2010

La Opinion

Primero viene Florida, a continuación Nueva York y en tercer lugar California. Son los estados donde según un estudio dado a conocer ayer, se registra el mayor número de casos de fraude y engaño en el negocio de las hipotecas inmobiliarias.

Y cada día hay más, afirma el Mortgage Asset Research Institute de LexisNexis, pues entre 2008 y 2009 los engaños en esa industria en el país se incrementaron 7%, con un 10% en California.

El 8% de los casos analizados por el reporte ocurrió en la región que forman los condados de Los ángeles, Riverside y Orange, una de las más golpeadas por el reventón de la burbuja inmobiliaria.

La persistencia del delito de falsedad en las transacciones hipotecarias pone de manifiesto que los problemas que contribuyeron a crear esa crisis no han sido superados.

El tipo de delito financiero más común —59% de todos los casos denunciados—, afirma el MARI, es engaño a la hora de gestionar una hipoteca, por ejemplo, inflando los ingresos del prestatario para hacerlo parecer solvente.

Esta fue una de las prácticas más comunes en los casos en que los bancos otorgaron hipotecas chatarra o subprime.

La segunda forma más común de engaño es la sobrevaluación de las propiedades.

El estudio hace notar sin embargo que el ritmo de incremento de ese tipo de engaños fue mucho menor que en el período 2007-2008, en que hubo un repunte de 26%, atribuyendo el cambio a la existencia de mecanismos más estrictos de control en los últimos dos años.

Aun así, explicó Jennifer Butts, coautora del reporte, los números no lo dicen todo.

"Creemos que el fraude hipotecario está infravalorado, aun en las épocas en que hay enormes cantidades de transacciones", dijo.

La investigación de MARI pone de manifiesto que uno de los fraudes que empezaron a hacerse más frecuente en 2009 son los timos a personas que están desesperadas por salvar su vivienda.

En California, la procuraduría general ha perseguido decenas de casos en que agencias o agentes de bienes raíces defraudaron a sus clientes, a los que engañaron con falsas promesas de modificaciones hipotecarias.

En un caso extremo de ese tipo de delitos, la semana pasada agentes federales arrestaron en el norte de California a 18 personas de una red a la que acusan de engañar a los bancos con solicitudes falsas de préstamos hipotecarios. Según el FBI, las pérdidas por esas acciones superan los millones de dólares. Entre los arrestados se encuentran varios agentes de bienes raíces y ex empleados de instituciones financieras.