16 de abril de 2010
El Vocero
Los permisos de construcción siguieron cayendo en el mes de enero, tal y como ha venido ocurriendo sin interrupciones en los últimos 16 meses. Sólo mejoran los permisos para la construcción de vivienda, que en enero mostraron una tímida recuperación. Los permisos, un indicador del nivel de actividad de la industria de la construcción, han estado cayendo de forma generalizada desde hace cinco años. El número de permisos expedidos en enero disminuyó 17.5%, de 382 en el 2009 a 315. La caída es más profunda en los permisos de proyectos del gobierno (-79.4%) que en los privados (-5.3%). El valor de los permisos cayó en enero 9.3% hasta $66.1 millones, el nivel más bajo desde que empezó la recesión. En el 2009, los permisos se redujeron 27% y el valor de éstos se situó 30% de la cifra del 2008. Un aspecto positivo es que el número de permiso para la construcción de vivienda nueva aumentó 2.8% en enero, de 251 a 258 unidades, una tercera parte de lo que era habitual antes de la crisis. Por otro lado, las ventas de cemento, otro indicador de la actividad futura en el sector de la construcción, sufrieron una reducción de 49% en febrero, la mayor desde que empezó la recesión. Las ventas no han crecido desde el 2005. Las ventas habían disminuido 26.3% en el 2009. Por otro lado, la producción local de cemento bajó 50.2% en febrero, la duodécima caída consecutiva. En el 2009, la producción se redujo 24.9%.