18 de marzo de 2010
El Nuevo Dia
La Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) no fiscalizó al Consorcio creado para su mantenimiento y operación y los servicios que se ofrecieron no se realizaron de acuerdo con la ley y reglamentos aplicables, de acuerdo a una auditoría de la Oficina del Contralor sobre el Superacueducto del Norte. El informe establece que la AAA no hizo las auditorías requeridas sobre las operaciones del Consorcio y que realizó los desembolsos al organismo por servicios y compras de químicos, pero nunca retuvo la contribución sobre ingresos que correspondía. El monto por la retención de la contribución pudo haber alcanzado $8.6 millones, por los más de $123,000,000 que pagó al Consorcio. Señaló que aunque la AAA puede ser eximida de pagar el Impuesto sobre Ventas y Usos (IVU) en sus compras, nunca solicitó al Departamento de Hacienda la exención. Encontró que la ausencia de monitoreo y auditorías de las operaciones del manejo de agua potable, químicos y otros servicios "no permitieron a la Autoridad mantener una supervisión adecuada de los servicios de operación y de mantenimiento del Superacueducto, que pudieron propiciar el ambiente para la comisión de errores e irregularidades, y el incumplimiento de leyes y reglamentos federales y estatales, y de las cláusulas contractuales. También podría provocar un aumento en los costos de reemplazo de los equipos por la falta de un mantenimiento adecuado. De otro lado, se establece que existen almacenes de químicos, ya pagados, que no son utilizados para el tratamiento de aguas "porque no son necesarios". Según el documento, podría existir conflicto de interés en la firma de las facturas que serían pagadas por la AAA. "En la factura mensual remitida por el subcontratista al Consorcio, se incluyen, entre otras cosas, los honorarios fijos y los justificantes de los costos relacionados con la reparación y el mantenimiento, y la compra de químicos y seguros. La factura es certificada como correcta por el Gerente General del subcontratista. El Consorcio remite, a su vez, una factura a la Autoridad que incluye la cuenta y los justificantes remitidos por el subcontratista", explica el informe. Sin embargo, el Contralor indicó que la factura del Consorcio también está certificada como correcta por el Gerente General del subcontratista y el 26 de agosto de 2009, el Director Ejecutivo Auxiliar indicó a los auditores que el Gerente General del subcontratista es, a su vez, el presidente del Consorcio, lo que implica que éste tiene funciones conflictivas en la supervisión de los servicios de operación y de mantenimiento del Superacueducto. La auditoría reveló que el Consorcio incumplió con las recomendaciones del Departamento de Salud sobre la limpieza de los tanques de agua. La agencia, en una inspección, encontró escombros y acumulaciones de cal en los tanques que podrían tener efectos adversos sobre el agua potable y las futuras operaciones, sin embargo, el Consorcio se comprometió a realizar la limpieza al menos cada cuatro años, pero en verificaciones posteriores se demostró el incumplimiento. La AAA tampoco remitió durante varios años los informes de privatización de ese servicio a la Oficina del Contralor ni a la Cámara de Representantes.