16 de febrero de 2010
DiarioLibre.com
NUEVA YORK.-Docenas de dominicanos, en su mayoría mujeres, denunciaron ayer domingo durante un piquete frente a la compañía "Bendiciones Cargo Express" situada en el Alto Manhattan, que fueron estafados con millares de dólares en envíos por la empresa, presidida por Manuel Báez (Tito), quien cerró la embarcadora en la Calle 175 y Avenida Audubon sin dejar sin ningún rastro. En la República Dominicana figuraba como "encargado" Danny Acevedo con domicilio en la Avenida Sabana Iglesia número 79 de Ingenio Arriba (Santiago de los Caballeros). Se dijo que el dueño, estuvo recientemente arrestado en República Dominicana y que para poder pagar una fianza de $2 millones de pesos. Las maldiciones llovieron sobre "Bendiciones Cargo Express" y en las cajas y tanques enviados, había alimentos, ropas, medicamentos, equipos electrodomésticos, sillas de rueda y juguetes, en los que los estafados, invirtieron millares de dólares. Miguel Palacios, activista comunitario y uno de los afectados dijo que ese, no es el único caso que se ha dado sobre estafas de ese tipo, sino que se trata de una práctica repetitiva de engaño a la comunidad por parte de diversas compañías. Dijo que la mal llamada "Bendiciones Cargo Express", estafó docenas de personas. Palacios expresó que está recibiendo numerosas llamadas de parte de los estafados. "Las personas que estaban a cargo de la empresa, han desaparecido de la noche a la mañana y nadie, responde a los números que aparecen en sus letreros. Seguiremos denunciando la situación para que esta práctica de abusos y estafa, se detenga", añadió. Advirtieron que darán todos los pasos legales y se pondrán en contacto con las oficinas del Procurador General del Estado y el senador Eric Schneiderman, para que tomen medidas contra la estafa. "Consideramos que estas estafas, son una práctica que debe pararse definitivamente, porque hoy es esta compañía, pero muchas otras, como un caso en Brooklyn, que están haciendo lo mismo, lo que ocurre es que mucha gente se queda callada", agregó Palacios. Envió una caja con comida y dice creer que los estafadores no tenían permiso. Llamó a la Asociación de Dueños de Embarcadores para que se pronuncie al respecto, "porque esta situación crea la falsa percepción de que muchas empresas que son muy serias, también hacen lo mismo". Palacios dijo que habló con una secretaria de la empresa Cibao Cargo, porque en "Bendiciones Cargo Express", le dijeron que sus envíos se hacían a través de esa compañía, pero nadie tiene seguridad de ello. "No podemos sin embargo, reclamarle a Cibao, sino a Maldiciones Cargo Express". Adelantó que el martes se pondrán en contacto con la procuraduría. Manifestó que esos estafadores, de una forma u otra, tendrán que responderle a la comunidad. Los estafados, mostrando copias de sus recibos enarbolaron la consigna "¿Qué es lo que queremos?, ¡justicia! Una de las estafadas, Teresa Rodríguez, envió un tanque y tres cajas con arroz, máquinas para bizcochos, aceite. "Somos pobres aquí, pero allá en el país, son más pobres que los que estamos aquí y necesitan más que nosotros, pero ocurre que ladrones como el dueño de esta compañía, no entienden eso". Ella invirtió más de $4 mil dólares y pagó más de $300 el 12 de enero. La empresa se mantuvo esquivando con justificaciones y argumentos a los estafados. "Estos son abusos contra la humanidad y debemos terminarlos", dijo la señora Rodríguez. "Tampoco podemos llevar maletas porque las líneas aéreas están cobrando muy caro y tenemos que recurrir a estas compañías para mandar cajas y tanques", concluyó. Alma Colón envió 7 cajas, en las que había una cortadora de grama, aceite, arroz y muchas otras en lo que invirtió más de $600 dólares, además del pago de otros $300 por en el envío el 4 de noviembre del año pasado. "Me cansé de llamar y nadie contesta". Juana Mejía mandó tres cajas con una televisión y dos bocinas. "La televisión me costó $800 dólares y las cajas tienen un valor de $400, hice el envío en diciembre, pero se mantuvieron diciéndome una cosa hoy y otra mañana", añadió. "Me decían que el contenedor tenía problemas en el muelle, pero que ya iba a salir para ellos comenzar a repartir las mercancías, pero nunca lo hicieron". "A esos ladrones hay que meterlos presos", vociferaba a todo pulmón la señora Gladys Taveras que envió tanques, una conteniendo aceite, arroz y 30 paquetes de café Bustelo, jugos, leche y muchas otras cosas. "Ando pasando frío aquí para mandarle a mi familia y dejo de comerme los tostoncitos aquí, para que ellos coman allá y vienen estos ladrones a robárselo todo", añadió. Profiriendo maldiciones impublicables, preguntó que si los dueños de la embarcadora acusada, no nacieron también de una mujer. "Ladrones, estafadores, tienen que estar en la cárcel". La señora Carmen Polanco mandó flores, velones, café, servilletas, papel de baño, arroz, aceite, tenis, sábanas, frazadas y otras mercancías. Lo primero estaba destinado a la "vela" (novenario) de su madre fallecida. Invirtió más de $3 mil dólares en mercancías e hizo el envío el 8 de enero de este año. "Antes de ayer, vine a entregarles $200 dólares que restaban y me dijeron que ya iban a comenzar a repartir en Santo Domingo". Entre sollozos, dijo que su familia es pobrecita y que hizo muchos sacrificios en Nueva York para poder llenar los embases. "Me siento con un amargue de vida, que no hayo ni qué hacer al pensar que voy a perder mis dos tanques de comida y especialmente lo de la vela de mi mamá. Iré donde sea, porque quiero justicia", añadió Polanco. Palacios ofreció el número (646) 258-6766 para que otros estafados, se comuniquen con él y reciban las orientaciones e informaciones. Anunció una reunión esta semana con la mayor cantidad de perjudicados para acordar los pasos legales.
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