16 de febrero de 2010
El Nuevo Herald
Basta con ver los programas de televisión para percibir el actual impacto de la cirugía plástica. Abundan los programas en los que reconocidos cirujanos transforman a sus pacientes con múltiples cambios logrados en un quirófano. Para algunos expertos resulta preocupante la forma en que hoy se concibe la cirugía plástica y la tendencia a minimizar los riesgos. Recientemente, los medios de comunicación se hicieron eco de la cirugía múltiple a la que se sometió Heidi Montag, conocida como cantante y sobre todo por su participación en reality shows como The Hills de MTV. En noviembre del año pasado, Montag, de 23 años, se sometió a una sesión quirúrgica que incluyó un minilevantamiento de cejas, inyecciones de botox, cirugía de nariz, inyecciones de grasa en pómulos y labios, reducción de la quijada, liposucción en el cuello, arreglos en las orejas, aumento de las glúteos, liposucción en la cintura y en los muslos y revisión de sus implantes de seno. Aunque la cirugía por poco le cuesta la vida, ella ha declarado que no cierra la posibilidad de continuar con el proceso de transformación. En una entrevista realizada en enero, la joven declaró a Access Hollywood que casi no despierta después de los 10 procedimientos que tuvo en un día. ``Casi muero en el procedimiento. Tuvieron que usar tanto Demerol que, tal como le pasó a Michael Jackson, mi ritmo respiratorio era de sólo cinco respiraciones por minuto...', declaró. ``Las enfermeras tuvieron que ponerme oxígeno y llamar a mi cirujano plástico de emergencia. Fue una experiencia muy traumática', añadió. Aunque las cirugías fueron realizadas en noviembre, fue en enero que empezó a recuperar el movimiento de su rostro. ``Somos afortunados en tener a nuestra disposición toda la ciencia detrás de las cirugías...', concluyó. TOMA DE CONCIENCIA Algunos psicólogos hablan de la forma en que los jóvenes perciben la figura perfecta gracias a las imágenes en los medios de comunicación de cuerpos que han sido alterados digitalmente. Los médicos, además, hablan de los riesgos de las cirugías múltiples. ``Creo que un médico que hace este tipo de cirugías [múltiples y simultáneas] es irresponsable; además, debe sopesar practicarlas en una persona tan joven que al parecer no está muy bien psicológicamente', dice del caso de Montag el doctor Carlos Wolf, especializado en cirugía plástica y reconstructiva en Miami Plastic Surgery, en Kendall. El cirujano considera importante que las mujeres tomen conciencia de que la cirugía plástica es un procedimiento electivo que tiene sus riesgos y su período de recuperación. ``Se debe poner en una balanza los beneficios para el paciente y los riesgos que pudiera correr', señala Wolf. Otra parte es saber detectar en el paciente posibles problemas psicológicos, como el conocido como body dysmorphic disorder o transtorno dismórfico corporal, que afecta a la persona haciendo que perciba una imagen distorsionada de su cuerpo, por lo que se preocupa excesivamente por un defecto en sus rasgos físicos y desarrolla la urgencia de cambios innecesarios. ``Hay casos en que para el médico es tan importante decir ``no' como sus habilidades de cirujano', dice Wolf. RIESGOS RESPONSABLES Esto no quiere decir que la gente no pueda beneficiarse de los aspectos positivos de la cirugía plástica y de la seguridad emocional que brinda el tener cuerpos más agradables y proporcionados. Tampoco debe entenderse que ciertas cirugías múltiples sean siempre contraproducentes para el paciente. ``A veces lo más importante no es el número de procedimientos que se practiquen en una sola cirugía, sino su duración. Las complicaciones generalmente vienen con cirugías de más de seis horas', explica el doctor Baruch Jacobs, de Miami Beach Cosmetic and Plastic Surgery Center. ``Durante la cirugía existe el riesgo de que se acumule sangre en las piernas y se formen coágulos que pueden desplazarse y producir embolias en los pulmones, de ahí que se usen las botas de compresión que permiten que la sangre no se quede estancada y circule normalmente al corazón; las usamos hasta en las cirugías de una hora', explica Jacobs. Ciertos procedimientos, además, involucran más riesgos que otros. ``Es parte del conocimiento del cirujano saber qué combinaciones son las más adecuadas; una combinación común es el tummy tuck o lipectomía abdominal con el levantamiento de senos, que es lo que llamamos el mommy tuck, que se usa después de los embarazos', explica Jacobs. Aparte de las embolias se habla también de otros riesgos de las cirugías, como las infecciones, las reacciones a la anestesia y el sangrado. ``Con la anestesia puede haber reacciones alérgicas, aunque en la actualidad es mínimo el riesgo y en casos de cirugías menores se recurre más a la sedación o a la anestesia local', indica. Los riesgos, además, pueden aumentar con la edad, de acuerdo con Wolf. Procedimientos que se consideran de menor riesgo, como la liposucción, no están del todo exentos de complicaciones. ``La posibilidad es mínima, pero existe el riesgo de que se pueda producir una embolia de grasa en el pulmón', explica Wolf. ``En Estados Unidos hay un límite en la grasa que se puede extraer. La liposucción no es para adelgazar, es para dar contorno al cuerpo, pero se ha ido perdiendo ese concepto', advierte. Una vez tomada la decisión de la cirugía, lo importante es ponerse en manos de un cirujano acreditado por la American Society of Plastic Surgeons, quien puede explicar al paciente los riesgos de cada procedimiento, así como las posibilidades de cumplir con sus expectativas. •