8 de febrero de 2010
El Nuevo Herald
El crédito para el consumo en EEUU bajó en diciembre por undécimo mes consecutivo, lo que indica que la falta de crecimiento del empleo y la contracción en el crédito bancario están desalentando a los consumidores que toman préstamos. La caída de $1,700 millones en el crédito, menos de lo que habían previsto economistas, siguió a un desplome récord de $21,800 millones en noviembre, que fue mayor a la estimación preliminar, según un informe de la Reserva Federal dado a conocer hoy en Washington. Las cifras hacen un seguimiento de las deudas con tarjeta de crédito y los préstamos no renovables, tales como los que se destinan a la compra de automóviles. La serie de declinaciones es la más prolongada desde que se llevan registros e indica que el gasto de los consumidores --que constituye alrededor del 70 por ciento de la economía-- será restringido debido a que los estadounidenses no quieren contraer más deuda hasta que mejore el empleo. Los estrategas de la Fed, citando la situación del crédito bancario restringido, mantuvieron la tasa de préstamos interbancarios próxima a cero en su reunión de la semana pasada. ``Los consumidores han estado reduciendo sus deudas y no están endeudándose para financiar gastos como lo hacían en el pasado debido a la recesión', dijo Gary Thayer, estratega de macroeconomía en Wells Fargo Advisors LLC de St. Louis. ``Los bancos están otorgando préstamos pero lo están haciendo de una manera mucho más cautelosa y tienen que pasar a pérdidas muchos más préstamos para el consumo'. La economía perdió inesperadamente 20,000 empleos en enero después de una baja de 150,000 un mes antes, mostraron el viernes las cifras del Departamento de Trabajo en Washington. Las revisiones de datos previos aumentaron el número de puestos de trabajo perdidos en la recesión a 8.4 millones. Los economistas habían pronosticado que el crédito para el consumo iba a bajar en $10,000 millones en diciembre, según la mediana de 33 estimaciones en un sondeo de Bloomberg News. Las previsiones habían oscilado entre una declinación de $13,000 millones y un incremento de $5,000 millones.