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  Por el libro
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4 de febrero de 2010

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Washington, 4 feb (EFE).- Las autoridades estadounidenses anunciaron hoy que han lanzado una investigación sobre problemas en los frenos del Toyota Prius 2010 poco después de que el fabricante japonés reconociera problemas con el diseño de sus frenos.

Los problemas de los vehículos Toyota, que en las últimas semanas se ha visto obligada a llamar a revisión millones de vehículos en Estados Unidos por varios defectos, provocó que el secretario estadounidense de Transporte, Ray LaHood, mantuviera en la noche del miércoles una conversación con el presidente de Toyota, Akio Toyoda.

Según un comunicado dado a conocer hoy por el departamento de Transporte, durante la conversación, Toyoda aseguró a LaHood que "Toyota se toma muy seriamente las preocupaciones sobre seguridad de Estados Unidos y coloca la seguridad como la máxima prioridad de la compañía".

La Agencia Nacional para la Seguridad en la Carretera de Estados Unidos (NHTSA, por su sigla en inglés) dijo que ha recibido 124 quejas de consumidores relacionadas con la pérdida temporal de frenada sobre carreteras irregulares y que en cuatro casos el problema pareció causar accidentes.

NHTSA dijo que está investigando alrededor de 37.000 Prius 2010 vendido por Toyota en Estados Unidos.

El Prius 2010 es la tercera generación del modelo que se ha convertido en un éxito de ventas en Estados Unidos y ha asentado los vehículos híbridos como una nueva categoría en la que los principales fabricante de automóviles del mundo están invirtiendo grandes recursos.

LaHood emitió una declaración en la que aseguró: "la seguridad es nuestra principal prioridad. Por eso, en las últimas semanas, NHTSA también ha emitido un aviso a consumidores sobre la llamada a revisión de varios modelos de vehículos Toyota y el Pontiac Vibe con respecto a pedales enganchados y aceleradores atascados".

El secretario de Transporte añadió: "seguiremos vigilando de forma estrecha estos asuntos".

A finales de 2009, Toyota tuvo que llamar a revisión 5,4 millones de vehículos en Estados Unidos porque el pedal del acelerador de varios modelos se quedaba enganchado con la alfombrilla del lado del conductor.

A principios de 2010, Toyota emitió dos nuevas llamadas a revisión, que afectaban a 2,3 millones de vehículos algunos de ellos también incluidos en la anterior llamada a revisión, con respecto a un defecto que atascaba el pedal del acelerador.

Precisamente, NHTSA solicitó una detallada información al fabricante del pedal afectado por las dos últimas llamadas a revisión, la compañía CTS.

NHTSA reveló en documentos dados a conocer hoy que está investigando si CTS ha vendido productos similares a otros fabricantes de automóviles y si la empresa cumplió con todas las normativas antes de distribuir el componente entre sus clientes.

La agencia también quiere saber cuándo CTS supo que los conductores de Toyota estaban presentando reclamaciones sobre aceleradores atascados.