4 de diciembre de 2009
La Opinion
Nueva York/EFE —El financiero Elliott Broidy, fundador del grupo Markstone Capital, se declaró ayer culpable de realizar pagos a funcionarios relacionados con la gestión del fondo público de pensiones de Nueva York, informó el fiscal Andrew Cuomo. Broidy reconoció ante un juez neoyorquino que había pagado casi un millón de dólares en regalos a funcionarios de la Oficina del Contralor (Fiscal de Cuentas) de Nueva York, encargada de gestionar ese fondo, con el fin de obtener una inversión de 250 millones de dólares para su firma. "Para Broidy, era un precio pequeño que pagar. Para los contribuyentes de Nueva York, el perjuicio es incalculable", manifestó ayer Cuomo. El financiero, enfrenta a una pena de hasta cuatro años de prisión, y devolverá 18 millones de dólares que su firma recibió del fondo estatal.