16 de octubre de 2009
Yahoo
CHARLOTTE, Carolina del Norte, EE.UU. (AP) - Citigroup anunció el jueves que sus resultados en el tercer trimestre se vieron afectados negativamente por el impago de miles de millones de dólares en sus tarjetas de crédito y préstamos hipotecarios. El banco dijo que obtuvo 101 millones de dólares en beneficios antes de abonar 288 millones de dólares en dividendos a las acciones preferenciales y la oferta de intercambio de deuda que dio al gobierno federal una participación del 34% en el banco. Incluyendo esas partidas, la entidad con sede en Nueva York sufrió una pérdida de 3.240 millones de dólares. Citigroup, uno de los grupos más afectados durante la crisis crediticia y la recesión, dijo que las pérdidas generadas por los préstamos morosos durante el trimestre sumaron unos 8.000 millones de dólares, 386 millones menos que los casi 8.400 millones perdidos en el segundo trimestre, aunque un indicio de que muchos consumidores sigue abrumados por los apuros económicos. Los resultados de Citigroup son un indicio no solamente de su salud corporativa tras perder casi 190.000 millones de dólares en 2008 y necesitar una infusión de 45.000 millones de dólares del erario, sino de la economía nacional, ya que el banco atiende a los consumidores. Los grandes bancos, incluyendo Citigroup, advirtieron cuando fueron anunciados los resultados en el segundo trimestre que las pérdidas crediticias continuarán el próximo año. Empero, los inversionistas reaccionaron negativamente ante el informe del banco sobre la continuidad de sus copiosas pérdidas y hicieron que las acciones de Citigroup bajaran 27 centavos (5,4%) a 4,73 dólares al mediar la jornada de contratación. Dentro de sus gestiones para reconstruir el banco, Citigroup dividió en enero sus operaciones en dos entidades: Citicorp y Citi Holdings. Además, la empresa sigue vendiendo activos. Citicorp, su operación básica de créditos a los consumidores y corporativos, tuvo utilidades de 2.300 millones de dólares en el tercer trimestre. Citi Holdings, que agrupa los negocios improductivos y los activos tóxicos que el banco piensa vender cuando concluya la crisis crediticia, sufrió una pérdida trimestral de 1.900 millones de dólares.
