26 de septiembre de 2009
El Vocero
Con las cesantías anunciadas ayer en el sector público, que dejarán en la calle a unos 16,970 trabajadores, se anticipa un incremento considerable en el número de llamadas a las instituciones que manejan dificultades con el crédito y a las entidades financieras, en buscar de alternativas para cumplir con sus pagos. Representantes de ambos sectores ya aseguran alzas significativas en cuentas morosas, préstamos en pérdidas y un aumento en las quiebras. Arturo Carrión, director ejecutivo de la Asociación de Bancos de Puerto Rico, dijo que indudablemente habrá un impacto sólido para los distintos sectores del país, y en cuanto a la banca reconoció el aumento en la morosidad y en la delincuencia en los pagos. "Estamos claro en que el impacto es muy fuerte, pero se va a ayudar a las personas en lo que sea posible. La banca tiene unas reservas y el capital de los bancos es sólido", añadió. "Hemos estado insistiendo hace un tiempo que inmediatamente se comuniquen con las instituciones financieras. Las personas deben comunicarse con su banco y si tienen más de un banco pueden ir al Consumer Credit Counseling. Que no esperen que el problema se convierta en una crisis más fuerte", recomendó Carrión. Por su parte, Roberto Baerga, presidente del Consumer Credit Counseling en Puerto Rico, informó que las llamadas en busca de ayuda se han incrementado desde la primera fase de despidos en el sector público, por lo que anticipan que a partir de la próxima semana el número crecerá aún más. A julio 31 de este año recibieron 22,800 llamadas, y el año pasado a la misma fecha la cifra llegó a 15,153. De esa cantidad, 14,064 personas han recibido consejería directa este año y un 30% logró acuerdos de pago para cumplir con sus acreedores. Un 10% deberá buscar ayuda legal y el restante 60% recibió un presupuesto para ponerse al día con sus deudas, relató Baerga. "Hemos notado un aumento en llamadas, no sólo de los que se quedaron sin empleo, sino de personas que tienen trabajo y están preocupadas. Tenemos que pensar que no es el final de nuestra vida productiva o económica. Si miramos bien vamos a ver luz al final del tunel", agregó. Entre las recomendaciones a los cesanteados están analizar su situación con su familia inmediata y establecer un plan de economía. Según Baerga, hay que pasar balance de los ahorros disponibles y de las ayudas que recibirán del gobierno, y con esta información preparar el nuevo presupuesto, para ver cuánto de las deudas se puede pagar, y empezar a recortar gastos innecesarios. Luego es que empieza la búsqueda de empleo. "Vamos a dejarnos de orgullo, no vamos a conseguir el mismo trabajo, los mismos beneficios y sabemos que tenemos unas responsabilidades. Si lo que consigues es un part-time cógelo porque te va a ayudar en lo que aparecen nuevas oportunidades. Vamos a vivir de otra manera", manifestó, y añadió que ya anticipan un aumento mayor en el número de quiebras. Según publicó EL VOCERO el viernes, en el mes de agosto se presentaron 1,019 quiebras, que representa un aumento de 35% en comparación al mismo periodo el año pasado. Mientras tanto, la banca se ha preparado para atender el efecto de las cesantías, que se refleja directamente en la industria. En el Banco Popular, tras la primera fase de despido de empleados públicos, desarrollaron un sistema para atender las dificultades de este sector, a través de servicios telefónicos y en línea, donde se canaliza el primer acercamiento del cliente. Le recomiendan a los desempleados que realicen un plan antes de buscar ayuda de sus acreedores, para que así exista un cuadro claro de su situación. "Sabemos que es un momento difícil, pero los exhortamos a que hagan una pausa y examinen cuál es su verdadera situación, si tienen otro recurso de entrada económica, y que comparen eso con sus deudas. Tenemos que ver cuáles son nuestros gastos para ver en dónde estamos a nivel financiero", dijo Mariemi Sierra, vice presidenta y gerente del Departamento de Cobro del Popular. Según Sierra, una vez realizado el análisis financiero en su hogar, las personas deben explicar su situación y solicitar la ayuda específica mediante carta. "Lo que queremos lograr es mover a la gente a la acción, mientras más rápido actúo más pronto comienzo a manejar mi crédito. Y eso demuestra la disposición del cliente a cumplir con sus obligaciones", expresó Sierra. Para los desempleados públicos con cuentas por pagar en el Popular pueden llamar al 787 771-2777 y oprimir la opción 6. También pueden acceder a la dirección www.popular.com/compromiso/atrasado.jsp Por su parte, Lucienne Gigante, vicepresidenta de relaciones públicas de Doral, informó que desde 2008, "a través de nuestros programas de reestructuración de préstamos, Doral ha ayudado a más de 16,000 familias que han atravesado situaciones difíciles financiaras, a mantener su hogar". Dijo que cada caso se trabaja de manera individual para identificar las alternativas de reestructuración disponibles. Mencionó que "Doral siempre está en la búsqueda de talento nuevo por lo que puede acceder a www.doralbank.com/empleos para conocer las oportunidades de empleos disponibles y enviar su resume". Los desempleados que necesiten más información en Doral pueden llamar a 787-749-7000.