8 de junio de 2009
El Vocero
En una dramática señal de cuan magullada está la economía, la demanda de electricidad en el país en un año se ha reducido por 1,200 megavatios diarios de sobre 3,500 MWH a sólo 2,700 MWH la semana pasada, lo cual es el equivalente a un tercio menos en el consumo diario y representa un retorno al promedio de ventas de electricidad de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) a principios de esta década. Miguel Cordero, director ejecutivo de la AEE, predijo en entrevista exclusiva con EL VOCERO que esta tendencia recesionista se mantendrá por el futuro cercano como consecuencia de varios factores incluyendo el cierre de empresas, una economía deprimida donde los consumidores tratan de cortar su cuenta de la luz para ahorrar dinero y una mayor conciencia entre los abonados de la importancia de la conservación. Para combatir esta baja, dijo Cordero, es indispensable para la AEE diversificar sus fuentes de energías, buscar nuevas formulas de financiamiento para cubrir sus operaciones y tratar de recortar gastos internos congelando vacantes y dejando de crear posiciones nuevas. "La demanda sigue bajando…. Las proyecciones (de consumo) están bajando", apuntó Cordero, quien al defender recientemente el presupuesto de la compañía de energía eléctrica ante la Cámara de Representantes colocó en $400 millones el déficit operacional estimado para el cierre de este mes cuando termine el presente año fiscal. Cordero le dijo a los legisladores que para el próximo año fiscal espera que sus medidas de austeridad y cambios operacionales le representen una reducción de $100 millones en el presupuesto de la agencia, la cual expresó cuadró durante varios años sus deficiencias fiscales con líneas de crédito a corto plazo que se remontan a $1.3 billones.
"Recesión profunda" "La baja en el consumo es indicativo de que estamos en una recesión profunda", dijo Sergio Marxuach, director ejecutivo del Centro para una Nueva Economía (CNE), una entidad sin fines de lucro y no-partidista que entre sus estudios económicos se encuentra un análisis a fondo de las operaciones de la AEE. Marxuach coincidió con Cordero en una entrevista telefónica por separado que la reducción en la demanda de electricidad se mantendrá, particularmente si el costo del petróleo sigue de nuevo este verano. El economista del CNE no espera que el costo del barril de petróleo llegue a las alzas récords recientes, pero dijo se espera suba a $100 el barril en el futuro cercano, lo cual inmediatamente se reflejaría en las facturas de los abonados.
Las medidas esbozadas por Cordero conversando con este rotativo reflejan cambios a corto y largo plazo en las operaciones de la AEE, incluyendo proyectos que se cuelgan y otros que, como el moriviví, están adquiriendo de nuevo vida.
De submarino a colgado Para comenzar, aparentemente ya se ha colgado el muy cacareado proyecto internacional para tirar un cable submarino que proveyése electricidad desde Colombia a la República Dominicana y de ahí a Puerto Rico. "No creo que necesitemos comprar energía externa, no creo sea necesario a base (de la baja en demanda), dijo Cordero. Irónicamente, dicho proyecto resucitó en Santo Domingo la semana pasada cuando el embajador dominicano en Colombia, Angel Lockward, declaró a la Prensa que "los estudios técnicos se encuentran avanzados y próximamente se producirá un encuentro entre las autoridades para examinar la evolución de los trabajos". El natimuerto proyecto del cable sumergido, que a partir de noviembre del 2005 fue fuente de costosos viajes a Colombia y a la República Dominicana por funcionarios de la AEE y del Departamento de Estado, presuntamente iba a proveer 500 megavatios de capacidad adicional para la Isla a un costo que nunca se aclaró exactamente. Hasta ahora se desconocen los detalles del acuerdo confidencial firmado en sus últimos meses en el poder por la administración del ex gobernador Aníbal Acevedo Vilá con los presidentes de los vecinos países y una empresa privada para el desarrollo de este controvertible proyecto.
Gas natural y carbón a la delantera Mientras la electricidad colombiana ya no va, el carbón y el gas natural son parte integral de los planes de Cordero así como el futuro uso de fuentes renovables tales como el viento y la energía solar. "Desde el 1993 mi plan energético incluía estos cambios porque pronosticamos lo que ahora está pasando, que iba a haber una serie de bajas de consumo y que la energía iba a ser muy costosa", dijo Cordero quien espera convertir eventualmente la planta de Costa Sur a gas natural y llevar a Aguirre a utilizar carbón. De acuerdo con Cordero, los ahorros que representa el cambio a estas otras fuentes son tales que si se hubiese podido desarrollar correctamente el difunto gasoducto para fines de este año la AEE hubiese podido cortar $800 millones su multimillonaria cuenta de combustible. La oposición al gasoducto, dijo, fue producto de un mal manejo del proyecto, más que nada de su imagen lo que dio lugar a que grupos ambientales, comunitarios y políticos de distintas afiliaciones se unieran en oposición. "La falla fue que no se llevó adecuadamente, yo traté de revivirlo pero es un caso en que el Gobernador se vio obligado a cambiarlo". Los planes de Cordero, quien describe al carbón y el gas natural como "pasos intermedios" al desarrollo de energía renovable, son que para el 2013 el petróleo sólo represente un 48.8% de las fuentes de energía de la AEE en lugar del 68.1% que la agencia dice representa hoy en día. En este período de cuatro años el consumo de gas natural subiría de 16.1% actualmente a 24.2% y el carbón esencialmente quedaría intacto en 15.0%.
Con viento y sol el futuro Dentro de esta estrategia el nuevo desarrollo sería la entrada finalmente en la Isla de fuentes alternas y renovables las cuales hoy en día representan menos del 1% de la producción eléctrica del país. Para el 2013, según la AEE, energía generada por fuentes renovables deben representar el 12.0% de su producción eléctrica, lo cual a largo plazo aumentaría al 15.0%. Cómo y cuando comenzarían a operar estos cogeneradores, no está claro, ya que Cordero le afirmó a este rotativo que ya ha firmado acuerdo para dos proyectos, incluyendo uno con Windmar para establecer el polémico campo de molinos de vientos en Guayanilla, pero cuando EL VOCERO pidió copia de estos acuerdos el director de comunicaciones de la AEE, Carlos Monroig, aseguró que todavía no se han firmado. Un mapa de la AEE de sus futuros proyectos de energía renovable, principalmente fincas eólicas, que Cordero hizo público el mes pasado ante la Asociación de Contratistas Generales muestran además de Windmar a cuatro proyectos de Go Green localizados en Maunabo, Naguabo, Culebra y Rincón; otro proyecto en Arecibo de Viento de Puerto Rico y dos de Liberty Circle, uno en Vega Baja y otro en Vieques. Todas estas empresas se crearon el año pasado, excepto Windmar Re que desde el año 2002 está tratando de entrar en el negocio de la energía eólica. Pero Marxuach enfatizó que lo importante en este momento es que la AEE eche a andar sin más demoras algunos de estos proyectos, para los cuales se espera el gobierno pueda recibir ayuda del gobierno del presidente Barack Obama. "Llevan años diciendo que van a tener energía renovable, la pregunta es cuándo se va a comenzar. Tenemos que movernos", dijo Marxuach. Se espera que Puerto Rico reciba de los fondos de energía de Obama más de $90 millones de los cuales sobre $50 millones estarían dirigidos para la AEE desarrollar proyectos de energía renovable y el resto le tocaría a la Oficina de Asuntos de Energía. Un solo proyecto de energía solar que requiere alrededor de 500 cuerdas de terrenos en Guayama para sus operaciones lo está desarrollando la AEE internamente, dijo Cordero, quien adelantó que este mes va a viajar a Washington para recibir un adiestramiento especial dirigido a los funcionarios que están trabajando en los proyectos de conversión de energía para facilitar su acceso a los nuevos fondos federales.