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  Por el libro
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26 de mayo de 2009

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MEXICO DF (Reuters) - La guerra de precios en el mercado de TV por cable comienza a rendir frutos para los consumidores mexicanos en medio de la crisis económica, mientras surgen nuevos proveedores y alianzas a la sombra de la rivalidad de los magnates más poderosos del país.

Recientemente, los más importantes operadores de TV de paga y telefonía de México se han apresurado a bajar sus precios y a lanzar nuevos y más atractivos paquetes, buscando seducir a clientes con menos dinero, luego de años de oferta limitada.

Dos grandes operadoras de cable, Cablevisión y Cablemás -de la gigante de medios Televisa- se asociaron con la gigante Megacable para lanzar "YOO", un paquete económico de TV de paga, telefonía e internet de banda ancha por 499 pesos (38 dólares).

El paquete, más sencillo que las ofertas tradicionales de las empresas, representa un ahorro de hasta un 24 por ciento respecto a los precios de los paquetes propios de algunas de las empresas.

"Es un sector cuyo ecosistema competitivo va a seguir cambiando muchísimo (...) hay diferentes frentes de consolidación", dijo Ernesto Piedras, director de la consultoría mexicana The Competitive Intelligence Unit.

La iniciativa "YOO" de Televisa y Megacable -que juntos tienen cerca de tres millones de clientes en el país- surgió pocos meses después de que la firma privada de medios MVS lanzara Dish, un servicio de televisión vía satélite a un precio de sólo 149 pesos (11 dólares).

Dish no ofrece telefonía o internet, pero sus cobranzas son manejadas por Telmex, el mayor operador de internet y telefonía fija del país, lo que despertó protestas de competidores porque ven en esa operación el primer acercamiento de Telmex al negocio de la TV.

Por su título de concesión Telmex no puede acceder al mercado de TV, pero los competidores creen que quiere esquivar la legislación al aliarse con Dish y así barrer al mercado con su enorme red telefónica.

Telmex -que cobra unos 30 dólares por teléfono e internet- y MVS han negado que su relación vaya más allá de un contrato de cobranzas.

Pero en un reporte reciente el analista Andrés Coello, de Bancomer, comentó que YOO busca "unir fuerzas contra Dish-Telmex".

"El deterioro de precios de telefonía y video en las ciudades en donde ha comenzado a operar la alianza Dish-Telmex está alcanzando un punto sin precedentes", añadió.

COMPETENCIA Y RIVALIDADES

El competidor directo de Dish en video satelital es Sky, también de Televisa, que al cierre del primer trimestre tenía cerca de 1.78 millones de clientes, y que también empezó a bajar sus precios recientemente hasta un 27 por ciento, según analistas.

Algunos especialistas comentaron que las nuevas ofertas podrían llevar a incrementar el acceso de los mexicanos a servicios de telecomunicaciones, uno de los principales objetivos anunciados por el presidente Felipe Calderón cuando accedió al poder en diciembre del 2006.

"Hay una nueva arena de competencia muy intensa entre operadores de telecomunicaciones por cable, Telmex y los otros operadores fijos ya establecidos", comentó Piedras de The Competitive Intelligence Unit.

El enfrentamiento comercial refleja rivalidades por el acceso a nuevos sectores por parte de gigantes empresariales como Emilio Azcárraga, el propietario de Televisa -el mayor productor de contenido televisivo en español del mundo- y Slim, uno de los hombres más ricos del mundo y dueño de Telmex.

La asociación mexicana de operadores de cable Canitec -a la que pertenecen Cablevisión y Cablemás- se opone a la entrada de Telmex a la televisión de paga y la acusa de bloquear la competencia en telefonía.

Slim, por su parte, ha dicho que su empresa está lista para prestar el servicio de TV.

Slim es a su vez accionista minoritario de Televisa.

Jorge Alvarez Hoth, que fue subsecretario de Comunicaciones en el gobierno precedente, comentó que las rápidas bajas de precios muestran lo que pasa una vez que las empresas empiezan a competir en los mercados y los temas regulatorios pasan a segundo plano.

"Es una guerra comercial. ¿Qué te dice eso?, que (...) en el momento en que empieza a haber competencia en los mercados y no en los tribunales, los precios bajan", sostuvo.

(1 dólar = 13.2 pesos)