26 de febrero de 2009
El Vocero
El debatible proyecto para enmendar la Ley que Regula las Operaciones de Establecimientos Comerciales, conocida como la Ley de Cierre, continúa dando de qué hablar, ya que mientras para unos representará una merma en los costos operacionales de los comercios, para otras es sólo una medida en detrimento de los empleados. La enmienda propuesta eliminaría la restricción a los horarios de operación en el sector privado, permitiéndole al comercio en función de la demanda del público, determinar sus horas de operación durante cualquier día de la semana, incluyendo domingos. El presidente de la Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA), Benjamín Negrón, solicitó una enmienda que les permita poder endosar la medida, en aras de proteger al empresario local reforzando otros estatutos vigentes como la Ley de Monopolio y evaluar su aplicación. Negrón indicó que la organización está a favor de permitir la apertura de los comercios durante los domingos sin control de horario, lo cual beneficiaría a las personas que trabajan y que quieren hacer sus compras los domingos sin límite de horario para luego hacer otras actividades, ya sean familiares, religiosas, etc. Esto beneficiaría también a las personas que desean trabajar los domingos. Sin embargo, no endosó que la Ley sea derogada totalmente, pues en cuanto a las compras de madrugada, señaló que, a diferencia de los domingos, aún puede justificarse la conveniencia del cierre nocturno para proteger a los empresarios locales y a los trabajadores sin afectar a la inmensa mayoría de los consumidores. También se expresó a favor del cierre durante días de fiesta oficiales. "Esta medida no cumplirá con su propósito de que el domingo discurra como cualquier otro día de la semana, si no se elimina el Artículo 7, el cual establece limitaciones para que los patronos determinen los horarios y la distribución de su personal. Si no se añade una enmienda a este proyecto para eliminar este Artículo, MIDA se vería en la obligación de oponerse a su aprobación. Los potenciales beneficios de la medida que hemos discutido ampliamente no se cumplirían, pues si se dispone para que los comercios abran los domingos pero el empleado es quien exclusivamente toma la decisión de trabajar ese día, y el patrono no puede reclutar personal a tiempo completo para cubrir esos nuevos horarios, el empresario no podrá tener la certeza de que tendrá la mano de obra necesaria para operar los domingos", apuntó el ejecutivo. Por su parte, José J. Alvarez, presidente de la Cámara de Comercio, favorece la total derogación de la Ley de Cierre, por entenderla que es discriminatoria para los pequeños y medianos comerciantes (PYMES). Agregó que esta derogación de la Ley le permitirá a los PYMES abrir los domingos como cualquier otro día, en igual de condiciones que las grandes cadenas y no como está sucediendo que muchos establecimientos han diversificado sus conceptos y continúan abriendo los domingos como un día cualquiera en detrimento de aquellos que no lo pueden hacer. A ello sumó, que esta apertura permitirá generar empleos en momentos en que son altamente necesarios. No obstante, para otros sectores la eliminación de la Ley de Cierre sólo persigue eliminar puestos permanentes y reducir salarios a través de la eliminación de la paga doble los domingos.