29 de junio de 2006

NUEVA YORK. ? Para calmar molestias de los usuarios de teléfono celular y salir nuevamente adelante en la industria, Verizon Wireless planea prorratear los cargos que cobra a suscriptores que rompen anticipadamente un contrato de forma que sólo paguen una cantidad proporcional al tiempo acordado en sus contratos.

El cambio en la cuota por terminación temprana de contrato será implementada este otoño para los nuevos clientes y cualquiera de los actuales suscriptores de Verizon Wireless que firmen un nuevo contrato, anunció el director ejecutivo de la compañía, Denny Strigl.

La compañía, propiedad conjunta de Verizon Communications Inc. y Vodafone Group PLC, también dijo que estaba revisando otra de las frustraciones de los clientes permitiéndoles a sus suscriptores actualizar sus aparatos con los mismos descuentos que reciben los nuevos clientes.

Las compañías inalámbricas de EU, cuyos suscriptores están atrapados con contratos y cuotas por cancelación temprana de contratos, generalmente ofrecen ahorros mucho menores, si alguno, por actualizaciones, mientras que están bajo contrato. La nueva flexibilidad de Verizon estará disponible para los suscriptores con planes de llamadas de 50 dólares después de 12 meses.

Las cuotas de cancelación han sido un problema muy antiguo entre los clientes, provocando demandas y propuestas legislativas para prohibirlas.

A principio de este mes, en California, un tribunal estatal decidió permitir una demanda colectiva buscando recuperar las cuotas por cancelación temprana de Verizon Wireless y Sprint Nextel Corp., de acuerdo con el grupo defensor de las personas mayores, AARP, el cual provee asistencia legal a los demandantes. Y a principios de junio, legisladores demócratas en Michigan propusieron una ley que limitaría las cuotas por terminación a 20 dólares.

Aproximadamente 50 millones de los 53 millones de suscriptores de Verizon Wireless están bajo contrato y casi todos afrontarían cuotas por terminación temprana de 175 dólares si decidieran cambiar de proveedor o simplemente cerrar sus cuentas.

"El número de quejas ante esta cuestión es el más grande que tienen nuestros clientes", dijo Strigl en una entrevista antes de su discurso, refiriéndose a los cargos de terminación como "un ojo morado" para la industria. "Ésta es una queja legítima: si ellos se marchan en el primer mes o en el mes 23, pagan la misma cuota".

El cambio en prorratear los honorarios no llega a ser una gran estrategia para Verizon, que presume de tener los mejores índices de retención de clientes de la industria, como podría ser para muchos rivales con más marcadas defecciones de suscriptores.

El anuncio del miércoles marca al menos la tercera vez que Strigl ha usado la conferencia anual inalámbrica de The Yankee Group para superar a sus rivales más importantes.

En 2003, Strigl salió a favor de dar a los usuarios de celular el derecho de mantener sus números de teléfono si decidían cambiar de abastecedores, un edicto de la Comisión Federal de Comunicaciones contra el cual todas las compañías inalámbricas más importantes trataban de combatir en corte. La revocación repentina de Verizon Wireless marcó un éxito de relaciones públicas, que deja a sus rivales parecer como menos a favor del cliente.