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  Estirando el chavito
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24 de enero de 2007

Por: El Nuevo Dia Orlando

Elegir un asilo de ancianos que se adapte a las necesidades de un familiar puede ser una misión que conlleve mucho tiempo y dinero, pero que una vez que se encuentre ayudará a mejorar significativamente la calidad de vida de ese ser querido.

Olvidar tomarse las medicinas, la imposibilidad de movilizarse y realizar las labores cotidianas son algunas de las razones que pueden motivar a una persona de edad avanzada a buscar un sitio para vivir que le brinde una mayor seguridad y asistencia.

Con el paso de los años, los asilos u hogares de ancianos se convierten en una alternativa para personas de la tercera edad que ven disminuida su capacidad de desenvolverse independientemente.

Ya sea una institución de vida asistida o un asilo que cuente con servicios de enfermería especializada las 24 horas del día, lo importante es encontrar una opción que responda a las necesidades especiales y presupuesto de cada persona, de acuerdo con el Instituto Nacional sobre Envejecimiento.

Los hogares de vida asistida son una buena alternativa para aquellas personas que requiere ayuda en las labores cotidianas -como alimentación, aseo personal y transporte- pero no necesita de cuidado médico especializado.

En este caso, los adultos generalmente viven independientemente en su propio apartamento y la institución les proporciona los servicios básicos diarios.

Asimismo, si su familiar está delicado de salud es posible que un asilo de ancianos o una institución de enfermería especializada sea la opción más adecuada.

Este tipo de instituciones, además de alimentación y aseo, brindan cuidado médico y terapias físicas a sus residentes.

Ya sea que se decida por un hogar de vida asistida o un asilo de ancianos, el Instituto Nacional sobre Envejecimiento recomienda que explore y compare varias opciones antes de tomar una decisión definitiva sobre el sitio.

Averiguar si hay algunas de estas instituciones en el área donde el adulto reside actualmente, podría facilitar las visitas de familiares y amigos.

Cada estado cuenta con una oficina de protección de los derechos al cuidado a largo plazo (Long-Term Care Ombudsman), que puede proveer información acerca de los lugares que usted está considerando.

Para encontrar una de estas oficinas en su estado puede llamar al Localizador de Centros de Atención para Personas Mayores de la Administración Sobre el Envejecimiento al 1-800-677-1116 o a través de la página web (en inglés) www.eldercare.gov.

Si el asilo de ancianos es miembro del Comité Conjunto para la Acreditación de las Organizaciones de Atención Médica solicite la evaluación que recibió por parte de la agrupación.

Una vez que tenga una lista de posibles lugares, compare los servicios que brindan, la cantidad de residentes, los costos y métodos de pago y si la institución acepta Medicare o Medicaid.

Al visitar los sitios que esté considerando verifique si cuentan con la certificación de Medicare y Medicaid y observe cómo es la relación entre el personal y los residentes.

Hacer una segunda visita sin previo aviso, preferiblemente otro día de la semana y a otra hora, le permitirá conocer a otros miembros del personal, aseguran los expertos.