The Wall Street Journal
TOKIO—La decisión de Sharp Corp. de vender una participación de casi 10% al fabricante taiwanés Hon Hai Group subraya lo mucho que ha caído la otrora dominante industria electrónica de Japón.
Hasta ahora, las compañías japonesas supieron mantener a raya los acercamientos de rivales extranjeros pese a que su dominio de la industria de electrónicos se ha ido debilitando en las últimas dos décadas.
Pero mientras Sharp y otros gigantes tecnológicos nipones, como Sony Corp. y Panasonic Corp., sufren para seguir a la vanguardia frente a la competencia de rivales internacionales, ya no pueden depender de la ayuda interna.
Bloomberg News
Takashi Okuda, director gerente de Sharp Corp.
Sharp recibirá una inyección de unos US$800 millones en efectivo para apuntalar sus operaciones de pantallas de cristal líquido para televisores, un negocio central que es en gran parte culpable de las pérdidas multimillonarias que el grupo pronostica para el actual año fiscal.
A cambio, Hon Hai pasará a ser el mayor accionista de Sharp y sumará experiencia en el campo tecnológico que complementará su negocio como el mayor fabricante contratista de electrónicos del mundo.
La primera inversión extranjera importante en una firma tecnológica japonesa también pone de manifiesto el meteórico ascenso de Hon Hai, con sede en Taipei, conocido por ser uno de los principales proveedores de Apple Inc. Sus ingresos de US$117.000 millones del último año fiscal ensombrecen las ventas de Sharp, pese a ser 60 años más nueva.
Se trata de un claro indicio de que las íntimas relaciones que en su día gobernaron el mundo corporativo japonés se están deteriorando y marca un drástico cambio en la balanza de poder en la industria.
Hace unas décadas, durante su apogeo, las compañías japonesas eran la encarnación de la manufactura integrada verticalmente: se encargaban de todo, desde el diseño hasta la producción. Pero el éxito de los contratistas con ejércitos de trabajadores baratos permitió que empresas como Apple se concentraran en el diseño y promoción de productos mientras gestionaban las cadenas de suministro sin necesidad de instalar una fábrica.
Las empresas japonesas no lograron adaptarse a los cambios. Sus productos no podían competir en precio y demoraban más en llegar al mercado. Con el tiempo, la ventaja tecnológica del país se erosionó.
Cuando la industria electrónica de Japón empezó a perder brillo en los 90, las compañías recurrieron a la ayuda interna. Ante el temor de que sus conocimientos tecnológicos se filtraran a rivales asiáticos, las compañías electrónicas se consolidaron en una armoniosa red de empresas conjuntas y escisiones. Sin embargo, las pérdidas siguieron acumulándose y ahora, ya no les queda margen para rescatar pares locales con el propósito de mantener el equilibrio en la industria.
En 2007, por ejemplo, Sharp salió al rescate de Pioneer Corp., que necesitaba capital desesperadamente después de que su unidad de televisores plasma sufrió pérdidas cuantiosas. Cuando la situación de Pioneer empeoró, Sharp tuvo que hacer una rebaja contable de casi toda la inversión un año después, aunque hoy día sigue siendo su mayor accionista, con una participación de 9%.
Durante una rueda de prensa en Tokio, el director gerente de Sharp, Takashi Okuda, que asumirá la presidencia el 1 de abril, reconoció que su estrategia tiene que cambiar. "Hemos tratado de hacerlo todo por nuestra cuenta, pero el entorno es complicado", aseveró.
Sharp y Hon Hai llevaban contemplando algún tipo de cooperación desde junio del año pasado, cuando anunciaron planes de formar una empresa conjunta para desarrollar tecnología LCD.
El presidente de la junta de Hon Hai, Terry Gou, dijo entonces que la compañía también estaba en conversaciones con otras empresas japonesas de cara a posibles alianzas para tratar de contrarrestar la posición dominante en el mercado de rivales coreanos como Samsung Electronics Co. y LG Display Co..
Bajo los términos anunciados el martes en Tokio, Sharp emitirá nuevas acciones por valor de US$808 millones a compañías del grupo Hon Hai, incluyendo Hon Hai Precision Industry Co. y Foxconn Technology Co. Hon Hai también asumirá la mitad de la participación de 92,96% en su fábrica de pantallas LCD ubicada en Sakai, Japón.