El Nuevo Dia
Washington - El salario mínimo subirá a partir del primero de enero en 13 estados de Estados Unidos, incluidos Nueva Jersey y Nueva York, donde ahora se sitúa en el mínimo federal de $7.25, y que tendrán los mayores aumentos, de un dólar y 75 centavos y ascenderá a $8.25 y $8 por hora, respectivamente.
Connecticut, con un incremento de 45 centavos, y Rhode Island, de 25 centavos, son los otros estados con una mayor subida del salario mínimo, mientras que en Arizona, Colorado, Florida, Misuri, Montana, Ohio, Oregón, Vermont y Washington crecerá como máximo en 15 centavos para adaptarse al coste de la vida.
El centro de estudios progresista Economic Policy Institute calcula que estos cambios en el salario mínimo beneficiarán a unos 2.5 millones de trabajadores y que generará $619 millones de riqueza.
Miles de trabajadores, especialmente de cadenas de comida rápida, se han manifestado a lo largo de 2013 para reivindicar un aumento del salario mínimo, la última vez el pasado 5 de diciembre.
Asimismo, el presidente, Barack Obama, quien ha alertado en repetidas ocasiones de que la creciente desigualdad económica que se da en el país amenaza el "sueño americano", también ha pedido al Congreso que aumente el salario mínimo federal, fijado en $7.25 por hora, que se mantiene ahí desde hace cuatro años.
Con los cambios legislativos que entrarán en vigor el día de Año Nuevo, 21 estados tendrán salarios mínimos por encima del mínimo federal, al sumarse Nueva York y Nueva Jersey a los 19 estados que ya disponían de ellos.
Washington, donde aumentará en 13 centavos, seguirá como el estado con un salario mínimo más alto, de $9.32, seguido por Oregón, con $9.10 dólares tras una subida de 15 centavos, y Vermont, con $8.73 después de un incremento de 13 centavos.
Además, California, que cuenta actualmente con un salario mínimo de $8 por hora, lo subirá en un dólar a partir del 1 de julio de 2014, gracias a una ley estatal aprobada en septiembre que establece una crecida gradual que llegará a los $10 por hora en 2016.
"Mientras el Congreso da largas a un aumento en el salario mínimo federal, más y más estadounidenses ganan sueldos de pobres en industrias en expansión como los comercios minoristas o la comida rápida", señaló en un comunicado Christine Owens, directora del National Employment Law Project, una organización que defiende una subida del salario mínimo.
"Frente a la inacción federal, los estados están incrementando las pagas de los trabajadores con salarios más bajos, promoviendo el crecimiento y el consumo y dando un ejemplo a seguir al Congreso", apuntó Owens.