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Las cosas no pintan nada bien para Kodak, que se ha encontrado con que en su bancarrota, la cual se ha tratado de mantener fuera de la atención de las cámaras, no se han conseguido de momento obtener los ingresos buscados en lo vinculado con la venta de patentes. Hasta ahora Kodak ha recibido pujas iniciales de dos grupos de inversión, uno liderado por Apple y el otro por Google. El objetivo que tienen ambos es hacerse con las patentes de imagen digital que están en manos de Kodak y de las que se estima que su valor se encuentra fijado en 2,6 mil millones de dólares.
Desgraciadamente para Kodak, las pujas iniciales han estado por debajo de la cifra estimada, lo que implicaría que la compañía tendría poco capital con el que trabajar una vez los acreedores se hayan llevado la parte que les corresponde.
Según personas que están involucradas con la subasta, Kodak ha recibido pujas de los dos grupos de inversión por costes entre 150 y 250 millones por el lote de patentes que se pondrá en subasta esta misma semana.
En el mes de julio se dijo que Apple estaba colaborando con Microsoft y la firma de patentes Intellectual Ventures para pujar contra un grupo formado por pesos pesados de la industria, como Google, Samsung, HTC, LG y la empresa de patentes RTX, en su lucha por conseguir estas patentes tan valiosas que Kodak tiene en su posesión. Y aunque las pujas iniciales parecen ser muy bajas, la lucha entre los dos grupos se cree que llevaría a que el precio aumente de forma considerable. En el caso de las patentes de Nortel, otra empresa que entró en bancarrota y por la que Google se interesó, la compañía comenzó las pujas en 900 millones y la cifra definitiva fue de 4,5 mil millones por parte de un consorcio liderado por Apple y Microsoft.
UN PROCESO DURO
En base a lo que dice una fuente, cualquier puja superior a 600 millones se ve como algo sano para el catálogo de patentes de Kodak. Otras personas familiares con el proceso dicen que los pujadores no esperan que la subasta supere esta cifra. No son buenas noticias para Kodak, que ha intentado mantener la bancarrota fuera del ojo de la prensa, con un juez ordenando que los pujadores, las pujas y el precio final se mantengan en secreto hasta que el ganador se decida el día 13 de agosto.
“El proceso de subasta, incluyendo información sobre pujas y la identidad de los pujadores, es confidencial en virtud de una orden de la Corte de Bancarrota”, ha dicho un representante de Kodak. “La divulgación de las pujas emitidas y la identidad de los pujadores violaría la orden de la corte, y Kodak cree que la especulación sobre los detalles y de los resultados potenciales de la subasta es poco apropiada”. Las 1100 patentes que Kodak subasta se dividen en dos lotes separados: uno relacionado con la captura y el procesado de imágenes digitales y otro vinculado al almacenamiento y análisis de imágenes digitales.
EL FUTURO DE KODAK
El gigante de la fotografía está buscando una forma de usar el dinero ganado de la subasta de patentes para pagar los 950 millones de dólares en deudas y completar una reestructuración corporativa que les permitiría emerger de la bancarrota como un fabricante de impresoras. Hay, no obstante, confusión en el aire, dado que Kodak ha mencionado que Apple está intentando interferir con la subata diciendo que tienen los derechos de 10 de las patentes a la venta. La compañía de Cupertino dice que ambas empresas codesarrollaron la tecnología en cuestión mientras trabajaban en la cámara digital QuickTake. Kodak ha emitido una demanda para mantener el proceso de subasta y recientemente ganó la disputa, lo que denegó a Apple el derecho a solicitar el registro de estas patentes.